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lunes, 13 de junio de 2011

Yo solita en Valladolid



Después de cenar me he vuelto a sentir sola. El libro que estoy leyendo no ha logrado entretenerme por mucho tiempo y finalmente he terminado encendiendo la tele del salón, para esperar así a que volviera Mario. Ese ha sido mi gran error. Serían las 12 de la noche y cambiando de canal en canal cuando me he topado con uno local que desconocía y que estaba emitiendo una película "algo más que erótica". Nunca me han gustado ese tipo de filmes pero confieso que hoy sin saber porqué, me he detenido a verla. Quizás haya sido por ese interés tardío por el sexo que en mí se ha despertado, o quizás porque las relaciones con Joaquín, que siempre fueron muy ocasionales, ahora son prácticamente inexistentes. No lo sé. Lo que sí sé es que no debí hacerlo.






En la primera escena que he visto, un joven director de hotel atendía con esmero en su despacho a una huésped casada. Confieso que ha llegado a excitarme y mucho. Aquella era también una mujer casada que, como he hecho yo, satisfacía sus instintos más bajos fuera del matrimonio. Aquellas secuencias han conseguido despertar en mí auténtico deseo por un hombre como aquel, un amante capaz de satisfacer al máximo a una mujer hecha y derecha. Pero ha sido cuando ha terminado aquella escena cuando he reparado en que en la parte inferior de la pantalla aparecían mensajes de texto que envía la gente a modo de chat y que en su mayor parte son de contactos. Al reparar en ello, han acaparado mi atención y no he tardado en ver anuncios de hombres de Valladolid, reclamando lo mismo que necesitaba yo. Cada vez que he visto uno de aquí, me he fijado más y más, pero ni por asomo he pensado que acabaría respondiendo a uno de ellos. Me intrigaba saber si serían reales, pero Valladolid es una ciudad no excesivamente grande y el solo hecho de poder dar con una persona conocida, aunque que sólo fuese por azar, ha frenado cualquier impulso mío a responder. Pero a los pocos minutos de eso, un nuevo mensaje atrajo mi atención:





JOVEN TRANSPORTISTA DE PASO ESTA NOCHE EN PUCELA A CASADA TETONA O INSATISFECHA. TE MONTO ESTA NOCHE EN MI CAMIÓN. TLF: 680 -- -- --





No sé qué se me pasó por la cabeza. Supongo que sería el ver otro anuncio de aquí, pero esta vez de alguien de paso y que no podría comprometerme. El caso es que fue leer esto y no dejar de imaginar la situación. Un transportista joven buscando mantener relaciones en su camión... Imaginaba la situación una y otra vez y si con la película estaba excitada ahora lo estaba mucho más. Imaginaba a alguna mujer acercándose hasta donde estuviese aparcado ese hombre y subiendo a su camión. Le imaginaba a él sobre ella, penetrándola con rudeza hasta hacerla llegar al éxtasis. Mi mente seguía y seguía hasta que de pronto volví a leer otro anuncio de aquella persona:





VALLADOLID. JOVEN CAMIONERO REVIENTA VAGINAS EN EL POLIGONO DE ARGALES. DOTADÍSIMO. ACÉRCATE Y VERÁS.TLF: 680 -- -- --





No sé si fue ese lenguaje grosero o el morbo añadido de hacerlo en un camión, una de mis más frecuentes fantasías... Supongo que sólo por satisfacer mi curiosidad y nunca pensado en hacerlo realidad, decidí responder y envié un SMS al número que vi en el anuncio. Le puse algo así:





HOLA SOY ANA, 42a, MORENA, 110-60-95, CASADA, DE VALLADOLID. MI MARIDO YA NO ES MUY FOGOSO Y YO CADA VEZ MÁS. HE SENTIDO CURIOSIDAD AL VER TU SMS. CÓMO ERES?





Ni siquiera pensé que me fuera a contestar pero al minuto sonó el aviso del móvil. Tenía un nuevo SMS:





UMMMM, VAYA MEDIDAS PRINCESA. SOY IVÁN, ESTOY EN EL POLÍGONO DE ARGALES ESPERANDO PARA DESCARGAR MAÑANA A LAS 8. TE ANIMAS A VENIR?





No supe reaccionar. Supongo que al ver los anuncios en la tele nunca pensé que detrás hubiese personas reales pero ahora tenía la prueba de que sí, que era cierto y este buscaba un encuentro muy real. A los 3 ó 4 minutos sonó de nuevo el móvil. Tenía un nuevo SMS:





NO TE LO PIENSES PRINCESA. YO 32, MORENO, 1.90, 85KG, ATRACTIVO Y CON GANAS DE darte mucha marcha. TIENES COCHE? puedes escaparte y venir? NO TE ARREPENTIRÁS. TE HAN FOLLADO ANTES EN UN TRAILER?





Fue leer esto y notar que mi excitación se acrecentaba aún más, volviéndose prácticamente insoportable. Sin pensarlo le contesté:





MI MARIDO ESTÁ TRABAJANDO Y MI HIJO HA SALIDO CON SUS AMIGOS. VOLVERÁ SOBRE LAS 3. SÍ TENGO COCHE





Al instante me contestó:





Puedo durar 2 horas y media o 3 por polvo, Dándote mucha caña, Y echarte 5 ó 6 Los dos primeros sin sacarla. no quieres probar a ponérselos? ven que nos da tiempo. VERÁS COMO SALES NUEVA DE MI CAMIÓN...





Estaba excitadísima. No dejaba de pensar que no volvería a tener otra oportunidad así cuando, de pronto, sonó el móvil de nuevo. Se le veía insistente y estaba logrando su cometido; me lo estaba planteando ciertamente. Su nuevo SMS:





ESTOY EN LA CALLE COBALTO, PRINCESA. ES EL ÚNICO TRAILER AZUL. VEN QUE NO SABES COMO ME TIENES. VOY A REVENTAR EL BOXER DE CÓMO ME HAS PUESTO. TE ESPERO. CUANTO TARDAS? CON QUÉ COCHE VIENES?





No le contesté. Pero no podía quitarme de la cabeza la idea de ir. No aguantaba más la excitación que tenía. Al poco, decidí acercarme sin decirle nada, simplemente por ver si todo era cierto, lo del trailer azul en la calle cobalto y con suerte, ver desde el coche como era ese hombre que me había encendido por dentro, a través del parabrisas de su camión. Aunque sólo fuera su silueta. Sin pensarlo casi, me puse unas medias negras con liguero, una falda de tubo bastante ceñida y una blusa blanca un poco escotada que dejaba ver parte de mi generoso busto. Me maquillé un poco y bajé al garaje. Estaba arrancando el coche cuando sonó de nuevo el móvil. Tenía un nuevo SMS:





NO TE LO PIENSES PRINCESA, QUE UNA XL DE PRESERVATIVO TE ESTÁ ESPERANDO Y TE VOY A PEGAR UNA COMIDA DE COÑO PARA PREPARARLO QUE VAS A FLIPAR...





Fue leer esto y notar como mi ropa íntima se humedecía al momento. Al tiempo que conducía, pensaba en que quería saber quien era ese hombre que con su lenguaje soez había logrado encenderme así... A esas horas no había tráfico y en 10 minutos llegué a la entrada del polígono. Esperaba en un semáforo en rojo cuando me llegó otro SMS. Miré por el retrovisor y como no venía nadie detrás decidí leerlo a pesar de que el semáforo acababa de abrirse:





LA QUE PRUEBA REPITE PRINCESA, Y SÉ QUE TE VA A GUSTAR. ME DIJISTE UNA 110 DE DELANTERA, NO? UMMM, IMAGINAS ALGO ENORME ENTRE ESAS TETAS....?





Había llegado hasta allí pero ahora dudaba de si acercarme o no. Estaba parada cuestionándomelo cuando llegó otro SMS. El chico desde luego era insistente:





VAMOS GATITA, NO SEAS MALA Y VEN, VERÁS LO QUE DISFRUTAS. SI TE GUSTAN BIEN GORDAS LO PASARÁS DE MIEDO... NECESITO REVENTAR UN CONEJÍN Y VAS A SER TÚ LA AFORTUNADA. ACÉRCATE Y PROBARÁS ALGO REALMENTE BUENO....





No podía más, tenía el coño empapado. Arranqué de nuevo y giré despacio hacia la calle cobalto, nerviosa y esperando ver el camión. Enseguida pasé de largo dos trailers blancos aparcados en línea en la puerta de una empresa y de inmediato un camión rojo más pequeño en otra. Seguí avanzando hasta llegar a un nuevo camión. Era un trailer negro aparcado en el sentido que yo circulaba y justo delante de él estaba el de color azul. Al pasarlo miré por el retrovisor tratando de ver al conductor, pero no me dio tiempo. Paré en la calle de al lado y decidí volver, pero en sentido contrario, para ver de nuevo al camión pero esta vez de frente. Así tendría ocasión de poder observar al conductor. Según me aproximaba notaba como mi corazón latía a mil por hora. Pasé a su lado pero la calle estaba tan iluminada y la cabina a oscuras que no pude ver nada. Al llegar al final de la calle giré hacia la de la derecha y paré. No sabía que hacer, estaba hecha un lío y por mi mente sólo pasaba el contenido de su mensaje...



De pronto recobré la cordura. Debía de estar loca al haber ido hasta allí y decidí volver a casa justo en el momento en que llegó un nuevo SMS. Lo leí:





PRINCESA, ¿NO SERÁS LA DEL GOLF GRIS? NO QUIERO QUE DUDES. PASA DE NUEVO QUE ME HE BAJADO DEL CAMIÓN Y ASÍ ME VERÁS BIEN. SÉ QUE TE VOY A GUSTAR Y RECUERDA QUE LA QUE PRUEBA REPITE... TENGO LA XL QUE REVIENTA Y CARGADITA DE LECHE TODA PARA TI...





Sin pensarlo arranqué y me dirigí de nuevo a la calle. Pasé los trailers blancos, el camión rojo, al llegar al negro fui frenando y justo al pasar por el azul le vi. Era joven, podría tener 32 como dijo, y en efecto muy alto, moreno de pelo y de piel, y de constitución atlética. Llevaba un pantalón vaquero y una camiseta negra de manga corta algo ajustada que dejaba intuir un torso muy bien formado. Pero la sorpresa fue su rostro. Aunque de aspecto algo rudo, era sumamente atractivo. De mentón pronunciado, con barba de dos días, pelo algo desaliñado como lo llevan los jóvenes de hoy día, entre ellos mi hijo, y una sonrisa de chico malo unida a unos ojos negros penetrantes. Cuando quise darme cuenta ya había pisado el freno. No sabía que hacer pero pensé que era ahora o nunca, que oportunidades como esa no pasarían muchas más veces. Aparqué justo delante de él. Al bajarme pude verle esperándome con la puerta abierta del camión. Me dirigí allí y al llegar me dijo:





UMMM, ESTÁS PARA COMERTE PRINCESA. YA PENSÉ QUE NO VENÍAS. VERÁS COMO LO VAMOS A PASAR. DAME UN BESO, SOY IVÁN





Me hizo gracia. Sus ojos eran puro deseo y probablemente en cuanto subiese a su camión comenzase a follarme, pero me dio dos besos como si tal cosa. Le dije "soy Ana" y me respondió "anda sube princesa", al tiempo que noté sus manos en mis caderas para ayudarme y aprovechar de paso para sobar mi trasero.



Me senté y entró a continuación por la otra puerta. Me dijo que no me imaginaba así, según la cerraba. Comenzó a correr las cortinas de la cabina y me decía que estaba cañón, que nos lo íbamos a pasar "de puta madre". Ese lenguaje grosero hacía que me excitase cada vez más. Al acabar de cerrarlas encendió la luz y me dijo que estuviese tranquila que así nadie podría ver nada y comenzó a besarme apasionadamente o más bien lascivamente. Podía sentir su lengua sobre la mía e intentaba explorar con ella toda mi boca, a la vez que notaba como sus manos se abrían camino bajo mi blusa hasta llegar al broche de mi sujetador. Ni siquiera me enteré de que lo había abierto porque al instante lo dejó y comenzó a desabrochar los botones de mi blusa. Llegaría por el cuarto botón cuando noté que tiraba de mi sostén hasta quedarse con él en una de sus manos y con la blusa totalmente abierta le vi mirarme y decir:





"Uff, esto sí son un par de tetas, sí señor".





Cada vez me ponía más y más cachonda con sus palabras. Sus manos comenzaron a tocar mis tetas (como las llamaba él), a sobarlas, a amasarlas, sin dejar de hablar al tiempo. Le oía decir:





"Joder que tetones tienes princesa, que peras más cojonudas", "menuda tetada tienes".





Parece increíble pero con ese lenguaje estaba haciendo que me excitase más y más. Seguía oyéndole mientras notaba sus caricias en mis pechos:





"joder, firmes y duras como a mí me gustan, parece increíble".





No tardó en dejar de admirarlas para abalanzarse y empezar a succionar mis ya erectos pezones. Ahí no pude más y me dejé llevar. Me recosté sobre el asiento mientras él se abalanzaba y hundía su cabeza entre mis senos.. Yo dejaba caer mi cabeza sobre el reposacabezas del asiento y dirigiendo mi mirada al frente pude ver la foto de una mujer joven junto a la de un bebé colocadas sobre el parasol que tenía enfrente. Bajé la mirada y la alianza que vi en uno de los dedos que acariciaban mis pechos confirmó mis sospechas. Aquellos eran su mujer y su hijo, no había duda. El hombre que succionaba mis pezones era el esposo de esa mujer y el padre de aquella criatura. Pensaba esto al tiempo que notaba como se ocupaba de mis ya erguidos pezones. Los chupaba, los succionaba y los mordisqueaba al tiempo que le oía decir:





"joder que pezones, que cosa más cojonuda. sólo les falta echar leche" "son dos auténticos pitones, si señor".





Succionaba fuerte y alternaba uno de mis pechos con el otro. Notaba su lengua en el extremo de ellos, preparándolos para acto seguido mordisquearlos sin piedad. De pronto paró y volvió a asir mis pechos con sus fuertes manos, juntándolos para contemplarlos de nuevo. Repetía una y otra vez:





"tienes unas tetas de la hostia, princesa", "firmes, redondas y totalmente empitonadas, como a mí me gustan." "menudas ubres" "tu hijito no pasaría hambre, ¿eh?"





Yo era incapaz de hacer nada. La sensación era embriagadora y me retorcía al compás de sus manos. Únicamente acariciaba sus antebrazos mientras le dirigía furtivas miradas de aceptación. Ese cabrón sí que sabía preparar a una mujer. De pronto noté como su mano ascendía para la cara interior de mis muslos mientras su lengua recorría la totalidad de mi cuello. Dudé si cerrar mis piernas en ese momento pero para cuando quise reaccionar una de sus manos ya había echado a un lado mi ropa más intima y uno de sus dedos comenzaba a explorar mi sexo.. No podía más y creo que mi boca dejó escapar un gemido por ella. Él debió notarlo porque lo aprovechó para hundir su lengua en mi boca por completo buscando unirse con la mía. Ese hombre sí que sabía besar, dios mío. Su lengua recorría la mía por completo al tiempo que exploraba la totalidad de mi boca. De pronto noté como asaltaba a mi sexo con un segundo y grueso dedo. Gemí de nuevo y susurrándome al oído me dijo:





Psssshhh.... tranquila gatita, que te va a gustar....





Según dijo esto vi como comenzaba a pasar desde el asiento del conductor a la zona de al lado en la que estaba yo. Se situó frente a mí y vi como se agachaba entre mis piernas mientras sonreía.





"déjame ver que tienes aquí" - Le oí decir según me subía la falda hasta las caderas y comenzaba a tirar de mis braguitas hacia abajo -.





No sé que me pasó pero no intenté evitarlo en ningún momento. Para cuando quise darme cuenta tenía mi ropa íntima entre sus manos. Le vi olerla mientras me miraba intensamente.... Después las tiró a la parte de atrás de la cabina y hundía su cabeza entre mis piernas. No tardé en notar la humedad de su lengua en mi sexo... Ahí ya no pude más e inevitablemente separé más mis piernas dejándome llevar. Sabía lo que hacía. Con su lengua subía lentamente desde la parte superior de mi ano hasta la entrada de mi vagina, para a continuación detenerse sobre mi clítoris, al que dedicaba un tiempo mayor. Repetía esta operación una y otra vez hasta que de pronto note como la humedad de esa lengua introducirse en mi vagina. Nunca antes había sentido algo así. Notaba cómo penetraba en mi sexo con su lengua, cómo acariciaba las paredes de mi vagina con ella, haciéndome segregar abundantes flujos que no dudaba en tragar...



Inconsciente abrí mis piernas casi por completo hasta que mis zapatos de tacón llegaron a apoyar sobre el salpicadero de aquel camión. Él, al notarlo, paró. Acariciando con sus manos mis muslos, por encima de las medias, me miró y sonriendo me dijo:





Eso es gatita, ponte cómoda mientras te preparo el conejito. Tienes un chochín delicioso... todo un manjar...





Cuando volvió a hundirse en mi sexo, mis manos inconscientemente se dirigieron hasta su cabeza para guiarla en su cometido. Mis dedos acariciaban sus cabellos mientras él seguía y seguía. De pronto mi vista se nubló y con él entre mis muslos comencé a sentir el preámbulo del éxtasis. Él debió notarlo porque incrementó el ritmo para lograr su cometido.



Me parecía increíble que me encontrara allí, en semejante situación, subida a la cabina de un camión del que hasta hacía pocos minutos era un desconocido y peor aún, con mi falda por la cintura, sin bragas, abierta completamente de piernas, con la vista perdida al frente, mientras él devoraba ávidamente mi sexo....



La llegada de un intenso orgasmo me sacó de aquel trance. Con los ojos como platos y mirando al frente comencé a gemir intensa y descontroládamente. Me sentía mal viendo la foto de ese niño mientras el cabrón de su padre se ocupaba con devoción de mi sexo. Aquello me incomodó por lo que bajé la mirada hasta el salpicadero deteniéndose mis ojos en el hueco portaobjetos que allí había y en su contenido. Entre gemido y gemido alcanzaba a leer "CONDOMS" en la caja de cartón que tenía delante y que hasta ahora no había visto. Mientras él, que era un experto pese a su juventud, hacía que mi orgasmo se prolongase, yo continuaba leyendo: SIZE: EXTRA LARGE. SPECIAL THICKNESS (TAMAÑO EXTRA GRANDE. GROSOR ESPECIAL).



En ese momento noté como alcanzaba un segundo y más intenso orgasmo. Podía notar mi sexo completamente húmedo, desbordando fluidos sin parar que él impaciente succionaba. Al tiempo, le oía decirme:





"SÍ GATITA, SÍ. CÓRRETE. QUÉ CONEJITO MÁS RICO TIENES.....





Succionando nuevamente siguió diciendo:





LO TIENES PREPARADITO. Lo que VAMOS A GOZAR... TE LO VOY A REVENTAR POR COMPLETO, PRINCESA. VERÁS COMO TE GUSTA...



Separándose un poco y poniéndose casi de pie, se quitó la camiseta, dejando al descubierto sus anchos hombros, su musculoso e imberbe torso y unos abdominales bien marcados. Pude ver que empezaba a desabrocharse el cinturón para a continuación quitarse los pantalones dejándome ver sus potentes y gruesas piernas. Era realmente sexy, y su boxer ajustado marcaba un bulto exuberante como indicio inequívoco de lo que se ocultaba debajo de él.





Vamos "pa'tras", que estaremos más cómodos. Verás como en la litera disfrutas más que en tu casa. - dijo susurrándome nuevamente al oído -





"Tu casa". Fue oír esas palabras y volver a la realidad. De pronto me vi a punto de cometer otra locura, de dar rienda suelta a mis instintos más bajos nuevamente, como meses atrás en el pueblo de mi marido. Me veía allí, subida en un camión, con un auténtico extraño cuyos ojos me transmitían pura lujuria y lascivia, al tiempo que se desnudaba por completo en aquella litera.





Ummmm, qué maciza estás princesa. Tienes un cuerpo para el pecado... - Le oí decirme mientras me contemplaba allí tendido - Quítate la blusa y la falda que me tienes a mil - dijo al tiempo que comenzaba a deslizar su boxer negro por sus fornidas piernas hasta quitárselo-



¿Lo ves? Estoy deseando que la pruebes... es toda para ti. Va a ser tu primera follada en un camión, ¿verdad? - Me preguntó mientras me miraba con ojos de machito descontrolado y sonreía con cara de chico malo-



SÍ. - Respondí sin poder apartar la mirada de ese miembro erecto que apuntaba al techo de la cabina y que me asustaba por su gran tamaño y exageradísimo grosor.



Vas a gozar como nunca, princesa. Con esas medias y ese liguero me pones malo. Anda, se buena y ven pa´ca, que con esto te voy a arreglar el cuerpo...

















No sé que me pasó por la cabeza en ese momento o más bien sí. Recuerdo que por mi mente sólo pasaban escenas de mi marido y de mi hijo según abría la puerta del camión para bajarme. No podía hacerles de nuevo algo así. De pronto me vi corriendo y subiéndome al coche, arrancando y saliendo a toda velocidad de allí
Pasarían como 5 minutos hasta que pude tranquilizarme un poco. Estaba ya de vuelta a casa, en el Paseo de Zorrilla (una vía céntrica y principal de Valladolid), parada en un semáforo en rojo. Pensaba en lo sucedido, cuando comencé a oír los insistentes pitidos del coche que estaba junto a mí en aquel semáforo. Aquello me devolvió de nuevo a la realidad... Pensé que pasaría algo por la manera de tocar el claxon, pero al girarme y oír a los dos críos que iban en aquel coche decirme todo tipo de groserías, caí en la cuenta de lo que sucedía. Había salido tan rápido de aquel camión que aun llevaba mis pechos al aire. Tenía la blusa desabrochada por completo, totalmente abierta, e imagino que mi sostén y mis braguitas seguirían en aquella cabina... Por suerte el semáforo cambió a verde y arranqué al instante. Trataba de abrocharme la blusa al tiempo que veía a aquellos 2 mocosos circular por el carril de al lado a mi altura, poniéndome nerviosa. Con las ventanillas bajadas oía a uno de ellos gritarme:






"TETONAAA....." "¿DONDE VAS CON las peras AL AIRE?" "PARA Y TE HACEMOS PASAR UN BUEN RATO" - decía el otro haciendo gestos obscenos con su lengua, la cuál movía rapidísimamente de arriba abajo -.





Para mi desgracia, el primero de los grandes tramos rectos entre semáforo y semáforo llegó a su fin. Delante de mí tenía un nuevo disco en rojo. Al parar aproveché para terminar de taparme como pude. Ellos, por supuesto, se detuvieron al lado. Me decían de todo. Al copiloto le oía decir:





"QUE TE VA A GUSTAR, MAMI" "VERÁS COMO DISFRUTAS, SOMOS EXPERTOS EN MADURITAS MACIZAS COMO TÚ"





Estaba asustada, parecía increíble que a pesar de la hora no circulase ni un coche más por allí. A pesar del aspecto del coche, de gama media y pintado de todo tipo de colores (creo que los llaman tuneados o algo así), no pensaba que esos gamberros pudiesen llegar a más... En aquel momento supuse que vendrían de fiesta y cargados de alcohol hasta arriba y que irían de camino a sus casas. Pero aquel disco en rojo parecía eterno. Las voces de los chicos me sacaban nuevamente de mis pensamientos:





¿NO QUIERES ACABAR BIEN LA NOCHE MAMI? TENEMOS ALGO QUE TE VA A GUSTAR, JAJAJA... TE VA A GUSTAR MUCHO, MUCHO...





Al oír esto inconscientemente me volví y vi al conductor moviendo en círculos un preservativo de color rojo que debía de haber inflado hasta los topes.... Al verme mirar se echaron a reír y entre carcajadas el conductor me gritaba:





SI NO TE GUSTAN DE FRESA LOS TENEMOS DE MÁS SABORES, JAJAJA. ANÍMATE Y TE DAMOS LA CENA, JAJAJA. ¿No te apetecen unos buenos plátanos? ANÍMATE, ANDA...





No podía creer que me pasara esto a mí. El semáforo cambió y aceleré al instante, lo mismo que ellos. Según circulaba les oía decir.





"anda sé buena, y alégranos la noche que tenemos ganas de chochito..." "tendrás toda la polla que quieras..." "con nosotros te correras a base de bien".





Al aproximarnos a un nuevo semáforo decidí frenar y cambiar de carril para situarme tras ellos y no verles así, ya que las lunas de su coche estaban tintadas de negro.. En cuanto paramos vi como se abría la puerta del copiloto. Un chico de no más de 18 o 19 años se bajaba y rápidamente venía hasta mi ventanilla indicándome que la bajase. Con una de mis manos le dije que no. Fue entonces cuando vio mi alianza y a voces gritó al otro: "HOSTIA, QUE ESTÁ CASADA" "QUE NOS VAMOS A TIRAR A UNA CASADA" Volviéndose hacia mí y a través del cristal me dijo, nosotros tiramos ya "pa´parquesol" (un barrio al oeste de Valladolid).





"Anda síguenos y pasamos un buen rato, cielo. Verás como con nosotros lo pasas mejor que en tu casa... Sólo haremos lo que tú quieras pero no nos dejes así" - dijo señalándome un bulto enorme que lucía bajo su vaquero -. "SOMOS LEGALES Y DISCRETOS, Y ESTAMOS MAZO BUENOS, YA VES..." - Dijo dando una vuelta completa sobre sí mismo y dejando ver su aspecto de niño ya "crecidito"-. "Anda síguenos princesa, nos ves y eliges al que te guste. Si no te molamos pues NO PASA NA, pa casa y tan amigos..."- decía con una cara de pícaro increíble, aquel mocoso que no debía tener ni la edad de mi hijo....- "VENGA, NO TE LO PIENSES, QUE TE VA A GUSTAR, LO PASARÁS DE PUTA MADRE"





Y ahí estaba yo en mi coche, con un mocoso imberbe delante que no dejaba de parlotear sin parar, al tiempo que sus ojos tremendamente picarones me hipnotizaban. Apenas tendría los 18, pero su descaro y arrogancia (supongo que debida al alcohol) eran arrolladores. De nuevo le tenía delante, de brazos abiertos y dando vueltas sobre sí, dejando ver su aspecto de niño "crecidito". Vestía una camiseta de manga corta a rayitas, unas zapatillas y unos pantalones vaqueros como los que suele llevar mi hijo Mario, estrechitos y algo caídos de culo, que dejaban ver unos boxer azules y grises de lo más sensuales. Era moreno, alto, sobre el 1.80m, bastante fibradito para su edad, con pendientes y el pelo peinado hacia arriba algo revuelto que le daba un aspecto de niño tremendamente malo. Estaba segura que volvería locas a las niñas de su edad... La imagen que tenía delante de mí era de pura vitalidad. De pronto el semáforo se abrió y pude verle correr de espaldas hacia el coche al tiempo que gritaba:





"SÍGUENOS, SÍGUENOS...."





Arrancaron, metí la primera e inconscientemente giré el volante a la izquierda encaminándome detrás de ellos. Ni siquiera lo pensé. Fue un acto totalmente reflejo. Mi mente comenzaba a pensar: ¿QUÉ HACES? ¿QUÉ HACES? ES UNA LOCURA, LA SEGUNDA LOCURA DE LA NOCHE... RETROCEDE Y VUELVE PARA CASA... Pero a mis oídos llegaban las palabras de aquel diablillo que, asomando por la ventanilla, decía:





"OH, SÍ NENAA.... SIIIÍ.... ESTA VA A SER TU NOCHE.... SÍ, NENA... VAS A GOZAR..."





Al tiempo que comenzaba a agitar por la ventanilla un nuevo CONDÓN INFLADO, esta vez amarillo... "PREPÁRATE NENA..." - le oía decir-





Subíamos hacia Parquesol, pero enseguida se desviaron hacia las inmediaciones del estadio Nuevo Zorrilla, a una zona de aparcamiento. A medida que avanzaban despacio por esa especie de descampado urbano, comenzaba a ponerme nerviosa. Estás a tiempo de irte, pensaba pero de pronto vi detenerse a aquel Opel Astra multicolorido. Aparcaron y apagaron las luces. Yo hice lo mismo, dejando las luces dadas. Estaba nerviosa. Al interior de mi coche llegaba ahora con claridad la estruendosa música que procedía del de ellos. De pronto vi abrirse las puertas del copiloto y bajar al muchacho de antes. Debía estar loca si decidía llegar más lejos, era un auténtico crío... Pero lo sucedido anteriormente en aquel camión había encendido algo en mí que necesitaba calmar.



Para cuando quise reaccionar le tenía junto a mi ventanilla y me decía:





BUENO, QUERRAS ELEGIR, ¿NO?. Con cualquiera de los 4 te correrÁs de gusto...





¿¿¿¿Cuatro???? En ningún momento había parado a pensar en los que serían. Los cristales tintados de atrás no me habían permitido ver a nadie más a parte del conductor y del crío con el que hablaba... Fue entonces cuando vi abrirse el resto de puertas de aquel coche y bajarse a una panda de críos de aspecto similar al del mocoso con el que hablaba y que tanto me había excitado. Aquellos tres jóvenes se situaron en la parte de atrás de su coche frente a mi, apoyados sobré el portón trasero y mirando impacientes hacia donde estabamos.





El que estaba junto a mí me dijo:





¿estamos mazo buenos o no, nena? Que vamos al gimnasio pa molar a las pivas. Sólo tienes que elegir y empezamos a follar. Candidatos no te faltan y "toos" mazo cachondos. Yo soy Borja, El de la derecha el tony, el del medio el jona y el otro el David. El tony tiene 21 y el resto 19añitos... venga elige... cachas, depiladitos y preparaos "pa'follar". elige....





Por mi mente no sé que pasó. Tenía delante a tres críos de la edad de mi hijo y a otro dos años mayor ofreciéndome sexo, y yo estaba allí planteándomelo. Inconscientemente de mi boca salió un:





Sube tú.





Para cuando quise darme cuenta le tenía en el asiento de al lado, mirando al resto, levantando el pulgar hacia arriba y sonriendo.... No había vuelta a atrás.... Miraba a aquellos gamberretes a la cara mientras comenzaba a notar las manos de aquel mocoso desabrochar apresuradamente mi blusa. Noté que la abría quedándose unos segundos así como para mostrar a sus 3 compañeros aquello que estaba apunto de disfrutar. Veía la cara de sorpresa de aquellos tres, su lasciva mirada y sus bocas babeantes al tiempo que sentía las manos del otro amasar fuertemente mis senos.... Los agarraba impaciente, masajeándolos e intentando abarcarlos por completo con sus frías manos. Mis pezones al contacto con sus gélidos dedos reaccionaron al instante. Diría que hasta me dolían de lo erguidos que estaban.... No tardé en sentir sobre ellos la húmeda lengua de aquel chaval... sentí como empezaba a chuparlos, mordisqueármelos y succionarlos como intentando extraer algo de ellos. Pensé que me iban a reventar...





QUÉ TETAS, QUÉ TETAS....- LE OÍA DECIR ENTRE LAMETÓN Y LAMETÓN...- JODER QUE TETONES TIENES.... VAYA PAR DE PERAS, NENA.... -REPETÍA SIN DEJAR DE SUCCIONAR-





Los otros tres ya se habían apresurado hasta el capó de mi coche para no perder detalle y no apartaban la mirada de lo que estaba ocurriendo. Creo que el que yo les mirara, mientras su amigo se ocupaba de mí, les estaba excitando aun más. De vez en cuando me percataba de cómo alguno de ellos apartaba fugazmente su mirada de mí para dirigirla a sus compañeros y sonreír. Se daban algún codazo entre sí y hacían comentarios que no alcanzaba a oír debido a la música que procedía de su coche...





QUE MACIZA ESTÁS, NENA. TU MARIDO SEGURO QUE NO SABE EL POLVO QUE TIENES... - Le oía decir notando como remangaba mi falda hacia arriba buscando mi sexo.... - VAYA NOCHE, VAYA NOCHE..... VERÁS COMO LO VAMOS A PASAR.... - repetía sin parar al tiempo que acariciaba ya mi sexo intentando introducir alguno de su dedos en él....- UFFF, SIN BRAGAS Y MOJADITO.... ¿¿¿VENÍAS CON GANAS, EH???? MENUDO CHOCHITO TIENES..... - le oí decir notando como introducía dos de sus dedos por completo en él....-



¿Te gusta? Dime... - No respondí...- Hoy cumplirás mi mayor fantasía nena.... - ¿Cual?- Follarme a una MADURITA, casada Y maciza como tú. Quiero ponerle unos buenos cuernos al pringao de tu mario. Vamos pa?tras....



Tras decir esto abrió la puerta del coche.... Se le veía realmente seguro de lo que iba a hacer. Instintivamente hice lo mismo. Me bajé, caminé hacia la puerta de atrás y según la abría dirigí una mirada a aquellos jóvenes potrillos que nos miraban sin poder creer lo que sus ojos les mostraban... Estaba montando en la parte de atrás cuando Borja abrió la puerta de su lado y, antes de subir, comentó a sus amigos:





¿QUE OS DIJE EN EL SEMÁFORO?, ¿QUE ME FOLLABA A LA MADURITA O NO....? ¿HABÉIS VISTO QUE PAR DE PERAS? HAY QUE SER PRINGAO PA DEJAR SUELTA A UNA MACIZA ASÍ, ¿EH?. VOY A PROBAR EL CHOCHETE QUE SEGURO NO DISFRUTA SU MARIDO, JEJEJE.... ESE NO IMAGINA LOS CUERNOS QUE ESTÁN A PUNTO DE SALIRLE... MENUDA CLAVADA LE VOY A DAR, TÍOS





Allí estaba yo, en el asiento de atrás de mi coche a punto de cometer la segunda o tercera locura de la noche. El ruido que hizo al cerrar su puerta me sacó de mis pensamientos. Pude ver como se quitaba su camiseta y mostraba un torso completamente imberbe y muy marcado. Aquel mocoso seguro que traía de calle a más de una niña de su edad. Sonriendo se volvió hacia mí y tirando para debajo de mi falda dijo: QUÍTATE ESTO, GUAPA. UFFF.... - le oí decir cuando ya la tenía entre sus manos- CON ESAS MEDIAS NEGRAS Y LOS LIGUEROS, ME PONES A MIL, NENA. NI SE TE OCURRA QUITÁRTELOS..... VAMOS, TÚMBATE..... - Así lo hice mientras él se desprendía de sus deportivas y comenzaba a quitarse los vaqueros que llevaba. Sin duda era un crío pero con el cuerpo de casi un hombre. Los muslos que lucía debían ser el resultado de horas practicando algún deporte como el fútbol. Cuando quise darme cuenta lo tenía sobre mí, únicamente llevando un excitante boxer... Ese mocoso se había situado entre mis piernas y llevándolas hacia sus hombros se comenzaba a acoplar sobre mí. Sobre mi sexo notaba la presión de lo que sin duda era una brutal erección.-





TE VOY A FOLLAR, NENA - Comenzó a susurrarme al oído- TE VOY A FOLLAR....





En ese momento introdujo su lengua en mi boca y mirándome profundamente comenzó a besarme con auténtica pasión. Su lengua recorría cada rincón de mi boca, jugueteaba con la mía incansablemente, repitiendo estas acciones una y otra vez... Yo veía su mirada de deseo clavada en mí y notaba como con una de sus manos intentaba desprenderse de la poca ropa que llevaba. Sin dejar de besarme pude intuir como dirigía su miembro con su mano, derecho a la entrada de mi sexo... No tardé en sentir aquel caliente glande en la comisura de mi ser. Cuando noté que empezaba a presionar le oí decirme al oído:





ÁBRETE, NENA... ÁBRETE PA MI......





Fue en ese momento cuando sentí como aquel glande traspasaba la entrada de mi sexo y comenzaba a alojarse lentamente en él....





OOOHHH SIIIÍ, NENAAA.... ÁBRETE MÁS... QUIERO ENTRAR EN TU CHOCHITO, NENA...





Dijo continuando una lenta pero decida penetración que culminó al poco.... No tarde en notar su miembro por completo invadiendo mi vagina, momento en el que se detuvo y me dijo::.









UFFFF, QUE CONEJO TIENES, NENA...... COMO LO SIENTO... LO TIENES HÚMEDO Y ARDIENDO, ¿EH?. TE LO VOY A FOLLAR BIEN, NENA - dijo al tiempo que comenzaba una cadenciosa e imparable penetración que poco a poco hacía cada vez más y más profunda...-





JODER QUE CHOCHO TIENES.... QUE COSA MÁS BUENA.... ME ENCANTA, NENA.... ME ENCANTA... - decía incrementando el ritmo y la dureza de aquellas penetraciones que no tardaron en convertirse en auténticas embestidas-





TE VOY A FOLLAR BIEN FOLLADA, NENA... SE MUY BIEN LO QUE TE HACE FALTA.... - Le oía decir al tiempo que oía abrirse las puertas delanteras del coche y veía montarse a 2 de sus amigos.... Pero Borja ni se inmutó por ello y continuaba más y más, diciéndome todo tipo de cosas...-





¿disfrutas NENA? ¿DISFRUTAS? DIME SI TE GUSTA.... - Decía siguiendo con el ritmo de sus arremetidas-





Joder que si disfruta, a punto está de correrse la muy puta, mírala. - Decía el que estaba en el asiento del conductor.- A esta no la follan en casa... solo hay que verla... - Añadía el otro desde el lugar del copiloto-









Las arremetidas de Borja comenzaban a calmar la calentura que sentía en mi sexo.... Según me penetraba oía la música estruendosa que venía de su coche, que seguía con las ventanillas bajadas: CHUN, CHUN ,CHUN,.... Aquella música de discoteca martilleaba mis tímpanos al mismo ritmo que ese cabroncete martilleaba mi sexo sin parar. Ahí fue cuando realmente me dejé llevar. Fue como entrar en un estado de trance en el que un cúmulo de placenteras sensaciones comenzaba a invadirme por dentro. Notaba aquel firme miembro entrar y salir virulentamente en mí al compás de aquella música inhumana y a mis oídos llegaban las groserías que Borja me decía al ritmo de su follada:





TE VOY A REVENTAR NENA, TE VOY A REVENTAR... VOY A ROMPERTE EL COÑO CALIENTE QUE TIENES...





Empujaba fuerte, sin miramientos ni contemplación alguna, invadiéndome por dentro salvajemente para lograr su placer y probablemente ignorando que estaba a punto de hacerme alcanzar el que sería mi segundo orgasmo de la noche... Necesitaba sentirme así, deseada, utilizada, e incluso vejada... Mi excitación con ello crecía más y más y aquel crío que repetía insistentemente "¿disfrutas, guarra? ¿disfrutas?" me hacía alcanzar el éxtasis en ese preciso momento. Comencé a correrme en el asiento de atrás de mi coche sintiendo como aquel mocoso penetraba más y más en mí al tiempo que oía como sus dos amigos decían:





Joder si disfruta LA MUY GUARRA, se está corriendo viva..... mírala. - Decía el conductor.- Acaba ya cabrón, que yo también la QUIERO catar. - Decía el otro con cara de machito descontrolado...





No supe que pensar al oír eso. El orgasmo que me invadía por dentro no dejaba razonar a mi cabeza... Además, todo ocurría demasiado rápido. Fue en ese momento cuando pude ver al cuarto de ellos, que hasta ahora permanecía fuera del coche, mirándome por la ventanilla fijamente. Fue all ver que le miraba cuando abrió la puerta trasera situada junto a mí. Me encontraba en pleno orgasmo cuando vi a aquel chaval de la edad de mi hijo mostrándome orgulloso un pene de considerable tamaño en estado de auténtica erección. Al verlo no pude evitar pensar en mi marido y en sus problemas para conseguir una erección como aquella, o al menos medianamente firme con la que poder complacerme. El miembro de aquel muchacho era sin lugar a dudas lo opuesto totalmente a lo que tenía en casa, tanto en tamaño como en firmeza... Mi mirada atónita se clavaba en sus ojos al tiempo que mi orgasmo se prolongaba en el tiempo. Fue entonces cuando le pude oír...





CHUPA NENA, CHUPA. VERAS LO BUENA QUE ESTÁ. ESA BOCA TIENE PINTA DE SER TODA UNA EXPERTA... COME, COME... - Dijo agachándose desde la puerta y poniéndose casi de rodillas en el extremo del asiento hasta situar su miembro en la comisura de mis labios...-





PRUÉBALA NENA, PRUÉBALA....





En ese momento no podía pensar. Mis reacciones eran auténticos actos reflejos y mi boca se abrió lentamente para recibir en ella aquel miembro viril. Instintivamente comencé a lamer y saborear ese duro miembro. La erección de aquel mucho era enérgica. Su vigoroso miembro lucía extremadamente duro, cosa que anhelaba y echaba de menos en mi casa. Allí no puedo disfrutar de algo así y supongo que por eso comencé a succionarlo y recorrerlo de arriba abajo con mi lengua, incansablemente. Aquel chaval lo aprovechó y enseguida tenía casi la totalidad de su miembro alojado en mi boca llagando a invadir el comienzo de mi esófago, pero no me importaba . Me encontraba allí tendida en el asiento posterior de mi coche, disfrutando de dos enérgicos y vigorosos jóvenes empeñados en proporcionarme todo tipo de placer y con otros dos, cuya sola presencia y sus miradas de deseo, terminaban por ponerme, si cabe aun, más excitada todavía. Me encontraba completamente cachonda, como les oía decir









Joderrrr...... cómo la chupasssss. Qué cosa más buenaaaa.... sigueeeee, sigueeee...





Los dos de adelante decían:





JODER, LA TENÉIS COMPLETAMENTE CACHONDA, ESTÁ COMPLETAMENTE SALIDA, LA MUY PUTA. MIRA COMO TRAGA MIENTRAS EL BORJA SE LA FOLLA, TÍO. ES LA HOSTIA... NI EN LAS PELIS... MENUDA PAVA, JODER COMO SE ABRE DE PATAS pidiendo más...dadle duro....









Fue oírles decir estas groserías y comenzar a sentir un calor y una humedad en mi interior, que no tardé en reconocer. Enseguida noté aquello que ardía invadirme por dentro. No pude evitar decir: NO, DENTRO NO.... NO TE CORRAS DENTRO









AHHHHHHH, SIIIÍ. QUE GUSTAZO, QUE COÑAZO MÁS COJONUDO..... - decía Borja arqueando su espalda y con los ojos completamente en blanco-





HIJO DE PUTA, TE LAS'TAS TIRANDO A PELO???? - oí decir a los de adelante- ¿PERO COMO ERES TAN CABRóN....?





JODER, QUé BUENOOOOOO..... AAHHHH, QUé GUSTAZO....... SIÉNTELA TODA, SIÉNTELA.....





Le oía decir al tiempo que sentía como depositaba la totalidad de su semen en el interior de mi vagina. La multitud de espasmos que daba su miembro en mi interior hicieron que alcanzase un nuevo y más intenso orgasmo. Podía sentir como iba desalojando en mí 3, 4, 5, y hasta 6 potentes e interminables chorros de esperma. Debía estar llenando mi vagina por completo, o al menos esa sensación me daba al sentir como ese fluido viscoso y caliente me iba inundando por dentro, subiendo por mi vagina hasta invadir mi útero. La calidez de aquellos chorros hicieron que me muriese de placer.... en ese momento no pude evitar decir: Más, más... quiero más...





¿¿¿TE GUSTA EH, ZORRA??? TE GUSTA, ¿EH? AHHHH, SIENTE MI LECHE NENA, SIÉNTELA.... GOZA... ya sabía yo que así te iba a gustar más... MENUDA GUARRA ESTáS HECHA... AAAAHHHHHH..... aaaaahhhhh te gusta que te lo llenen, ¿Eh? ¿¿A que sí?? Dime, DIMEEE...





Sí, me gusta.... - dije sin ni siquiera pensarlo....-





YA LO VEO, PUES PREPÁRATE QUE TE LO VAMOS A DEJAR PERO BIEN LLENO. ESPERA QUE PASA EL TONY Y VERÁS QUE RACIÓN DE LECHE TE DA -Dijo Borja incorporándose sobre el asiento y poniéndose sus boxer.-





Todo transcurrió en unos segundos. Verle incorporarse, salir por su puerta y decir "que pase el siguiente". Enseguida pude ver como se montaba atrás al "Tony", que hasta ahora había estado en el asiento del copiloto haciendo de mero espectador.... Era un morenazo similar a Borja. Entró completamente en pelotas, sólo llevando unos calcetines grises y con una polla en completa erección... Era el mayor, el de 21años, y sin duda, por su cuerpo, este era ya todo un hombre... Según se montó le oí decirme: VENGA, A LO PERRITO NENA, DATE LA VUELTA y me hizo poner a 4 patas sobre el asiento trasero de mi propio coche. Él se situó de rodillas tras de mí y pronto noté el calor de su musculado pecho sobre mi espalda y cómo sus manos comenzaban a masajear mis senos de forma brusca. Le oía susurrarme al oído: ¿TE VA LA MARCHA EH MAMI?. ANDA QUE NO ESTÁS MACIZA NI "NA".... MENUDO PAR DE PERAS TIENES, SÍ SEÑOR, todo UNAS TETAZAS...... Y CÓMO ME PONES CON ESTAS MEDIAS.... - Dijo dándome una fuerte nalgada con una de sus manos.-



No pude protestar. Tenía el miembro del cuarto de ellos rozándome nuevamente la glotis.... Pronto noté como metía dos de sus dedos en mi coño con brusquedad, sin preparación alguna y me decía: CÓMO LO TIENES GUARRA, LISTO PARA LA MONTA.... ¿¿¿SIGUES CON GANAS DE POLLA??? DIME....



No le respondí, y dándome otra nalgada me repitió: DIME, ¿te apetece o no que te demos más polla...? tu chochito me está diciendo que sí, "so" guarrila... ¿¿¿¿qué me dices tú????





Sí, quiero más... - Respondí...-





En ese momento noté como un glande, bastante más grueso que el primero, comenzaba a introducirse en mi sexo. Tuve que dejar de succionar la polla del que estaba fuera del coche para soltar un jadeo y decir: oooh, siiiií.



Fue entonces cuando noté como me traspasaba por completo, dilatando al máximo las paredes de mi vagina. La longitud de aquel miembro no era nada excepcional (rondaría los 18 o 19cm, que sin duda pasaban con creces la media de a lo que estoy acostumbrada) pero el grosor era algo único. Era de esas pollas que te obligan a sentirlas bien quieras o no.... Al notarla dentro por completo solté un jadeo abrumador. Oí al "Tony" decirme: ¿TE GUSTA EH? ¿¿¿TE GUSTAN LAS BUENAS POLLAS??? PUES TOMA POLLA, SO GUARRA. - Me dijo penetrándome con saña. Me trataba como con desprecio y aquello no sé porqué me excitaba más y más... Notaba sus profundas y rabiosas penetraciones en mi sexo y comenzó a transportarme al séptimo cielo... Comenzaba a correrme de nuevo.... notando como bombeaba incansablemente aquel chaval en mí. Notando como obligaba a mi sexo a dilatarse más y más para poder albergar y dar cabida en él a ese pistón que no cesaba de horadar en mí... Mientras, yo me deleitaba con el miembro que el que estaba fuera de pie delante de mí seguía ofreciéndome... Me relamía de gusto y placer y veía a Borja de nuevo mirarme desde el asiento del copiloto junto al que aún permanecía inmóvil y sin entrar en acción. De pronto algo me sacó de mi éxtasis. El "Tony" había interrumpido su particular monta. Incluso llegó a desenfundar su miembro de mi sexo. Al volverme para ver que pasaba le vi sonreírme con cara de auténtico malote y decirme:





¿QUIERES MÁS, MAMI? DIME...





El muy capullo sabía que me tenía en sus manos y disfrutaba con la situación... Al ver mi silencio volvió a decir:





¿¿¿Quieres másss....???





Sí. - contesté yo sin dejar que mi raciocinio tuviese tiempo de poder hacerlo....-





Así me gusta, quiero que disfrutes de mi polla mami... pero ahora quiero que cabalgues... sube, sube... y móntate en ella. quiero ver botar bien esos tetones...





Dijo mientras se sentaba en la mitad del asiento y me daba una nueva y sonora nalgada para que obedeciera y me apartara. Una vez le vi sentado yo hice lo mismo, situándome entre sus piernas. Me puse de rodillas sobre el asiento trasero de mi coche, colocando cada una de mis piernas a cada lado de su cintura. Con sus manos apretaba fuertemente mis pechos apretujando y pellizcando de vez en cuando mis pezones. Según fui bajando no tarde en encontrarme con ese erguido mástil que impaciente me esperaba.... Al entrar en contacto con él y sentir su calor sobre mi clítoris, le miré y sonriéndome me dijo:



CLÁVATELA ENTRERA MAMI, ES TODA PARA TI. QUIERO QUE ME SIENTAS BIEN DENTRO...





En ese momento noté como dejaba de sobar mis senos y llevando sus manos hasta mis caderas, tiró de ellas bruscamente hacia abajo. Sentí que ese cabroncete me desgarraba por dentro.... Me miraba fijamente y me decía:





TODA MAMI, YA ES TODA TUYA. MENUDA TIGRESA ESTAS HECHA....





Decidí mantenerle la mirada arrogante que me dirigía, como desafiándole e intentando disimular el placer que me daba. Me decía:





Tienes un buen coño nena, ¿¿¿lo sabes no???





¿¿¿Ah, sí??? - Le dije yo...-





Un coño cojonudo, - decía mirándome y sonriendo con cara de chico malo y poniéndome a mil- MUY, MUY RICO, MAMI. ES DE LOS QUE OPRIMEN BIEN LAs POLLAs Y ESOS SON LOS MEJORES... DAN GANAS DE REVENTARLO BIEN





¿Sí? - Me estaba volviendo loca con esa sonrisa y esa mirada-





Sí, ¿no notas como me la pones...? MENUDA LEONA estás hecha, SOLO HAY QUE VER LA CARA DE VICIO QUE pones....





¿Yo cara de vicio...? - Le dije...-





Joder, DIRáS QUE NO... me encanta verte así...





¿Así, cómo? - le conteste haciéndome la tonta...-





ASÍ, ABIERTA DE PATAS SOBRE MÍ Y MONTADA SOBRE UNA BUENA POLLA. CON LAS TETAS TOTALMEMTE EMPITONADAS DICIéNDOME CóMEME, Y poniéndoselos bien puestos a tu marido...





Dijo comenzando a devorar mis pezones, a recorrer por completo mis senos con su lengua sin dejar centímetro de piel por saborear... Se detenía sobre mis aureolas pasanso una y otra vez aquella lengua en círculos primero en una y luego en otra para acabar recreándose en mis pezones, los cuales acababa mordisqueando con saña como buscando que fluyera algo de ellos... Fue en ese momento cuando comencé un cadencioso vaivén. Comencé a subir y a bajar sobre ese mástil a la vez que movía en círculos mis caderas. La sensación que aquel cabroncete me proporcionaba era indescriptible. Pronto noté como dejaba mis senos y como mirándome profundamente me decía sonriendo:





ME ENCANTA LA CARA DE VICIO QUE PONES, MAMI.. ASÍ, ASÍ, DISFRUTA BIEN DE MI POLLA....TE GUSTA, ¿EH? MENUDA TIGRESA ERES... ¿¿¿A QUE TE GUSTA???





SÍ, ME GUSTA. - Le dije incrementando el ritmo de mi galopada y manteniéndole firmemente la mirada....-





SÓLO HAY QUE VERTE... MENUDA MUJER ERES.... NENA....cabalga, cabalga lo que quieras, nena...que es toda tuya.....





Le hice caso. Ahí comprendí que me había dejado llevar y que ya no había remedio. Fue en ese momento cuando decidí mostrar a aquel mocoso arrogante quien era yo. Iba a tomar de él lo que necesitaba y a sentirme mujer de nuevo valiéndome de su cuerpo. Si alguien iba a ser usado aquella noche decidí que fueran ellos... estaba totalmente desbocada y fuera de mí...





OOOOH, SÍ NENA... JODER COMO CABALGAS... TENÍAS GANAS, ¿¿EH?? -Me dijo dándome una nueva y sonora nalgada-





SÍ. -contesté- TENÍA GANAS Y QUIERO QUE ME DEMUESTRES QUE SABES COMO HACER GOZAR A UNA MUJER....





¿TE PARECE POCO ESTO, NENA? CUANTAS QUISIERAN PILLAR LO QUE TIENES DENTRO...LO TIENES ARDIENDO NENA. ¿¿¿QUÉ PASA, QUE EN TU CASA NO TE ATIENDEN???? Dime...





Últimamente no mucho - le respondí desafiante-





PUES háRTATE DE POLLA, NENA.... JODER COMO ME LA OPRIMES CON TU CHOCHAZO, PARECE QUE ME LA QUIsieras ORDEÑAR. MENUDA EXPERTA ERES TÚ, NENA.... QUE GUSTOOO... MENUDO COÑO TIENES, CABRONA





Llevé mis manos a sus hombros y seguí cabalgando mientras comenzaba a correrme de nuevo. Él, al verlo, comenzó a morrearme con lascivia. Me besuqueaba el cuello y me decía al oído, sí nena disfrútala, disfrútala, para volver a introducir su lengua en mi boca y fundirla con la mía en una inolvidable fricción.... Él seguía y seguía con su largo beso provocando multitud de espasmos en mi sexo, cuando noté que se recostaba sobre el asiento para dejarme cabalgar con total libertad.





ES TODA TUYA... DISFRúTALA.... - Me dijo, como dejándose hacer...-





Continué cabalgándole y, reclinándome un poco hacia delante, logré alcanzar de nuevo la polla del que estaba fuera, que seguía allí de pie igual de firme, esperando a que volviese a dedicarme a ella con devoción. Disfrutando de aquellos dos miembros mientras Borja y su amigo nos miraban desde delante. El tal Tony recorría mis nalgas incesantemente, una y otra vez deteniéndose de cuando en cuando en los pliegues de mi ano. De vez en cuando le oía entre jadeos:









PERO QUE MACIZA ESTÁS, CABRONA.... PERO QUE MACIZA ESTÁS.....





Mientras oía al otro decir:





ASÍ, ASÍ, SIGUE.... MADRE MÍA COMO LA CHUPAS....





Estaba gozando como no lo hacía en semanas (desde que volví del pueblo de mi marido). Tony me estaba volviendo loca. Notaba el grosor de su miembro dilatar al máximo las paredes de mi vagina, como no consigue hacerlo Joaquín (mi marido). Su boca se ocupaba de mis erguidos pezones y sus manos masajeaban mis nalgas y mi esfínter... No pude evitar tener el enésimo orgasmo de la noche. Verme ahí, en pleno descampado disfrutando de dos jóvenes y enérgicos miembros tras haberme ocupado de otro antes, me excitaba más y más. Fue entonces cuando advertí que la puerta trasera se abría de nuevo. Al dirigir la mirada hacia delante pude ver solo a Borja pero no a su "colega". En seguida pude notar el peso de su cuerpo sobre mi espalda y como agarrando mis senos con firmeza desde atrás me decía al oído:





NO PUEDO MÁS, NENA. MIRA COMO ME TIENES....





En ese momento sentí como con sus dedos comenzaban una lenta penetración anal en mí... Me encontraba atrapada sobre el pecho de Tony y su cuerpo y con el tercero de ellos delante de mí, obligándome a que siguiera ocupandome de su polla, agarrándome firmemente la cabeza con sus manos. Pronto noté la cabeza de un glande no muy ancho abrirse paso por los pliegues de mi ano. Oía las palabras de Tony:





DISFRUTA NENA, DISFRUTA....





Y las del chico que tenía detrás:





Sí, nena...relájate y disfruta.... relájate Y VERáS SI GOZAS....





En ese momento sentí su miembro deslizarse por completo en mí, hasta notar como chocaba con su vientre sobre mis nalgas. Acababa de penetrarme totalmente. Podía sentir aquellos jóvenes y erguidos miembros totalmente en mí, casi rozándose, separados únicamente por una fina piel que evitaba que se rozaran entre ellos. En ese momento exploté de nuevo de gozo, ocasión que aprovecharon para comenzar con unas enérgicas, duras y acompasadas penetraciones que me llevaban más y más allá...





MENUDA LOBA - les oía decir...- MENUDA LOBA.... dale duro, tronco...más duro que la encanta... hasta los huevos. Préñala...





Pronto oí al de fuera decirme:





Me viene, nena, me viene - y me agarró firmemente de la cabeza hasta que pude sentir a aquel mocoso comenzar a vaciarse en el interior de mi boca evitando cualquier acción que pudiera hacer yo para zafarme.- TRAGA, PUTA, TRAGA..... TÓMATELA TODA... - decía emitiendo por su miembro unas interminables y descontroladas emisiones de semen que el muy cabrón me obligó a tragar.... Cuando acabó retiró su miembro de mi boca y entre risas le podía oír: NI GOTA, JEJE... NO HA DEJADO NI GOTA..... MENUDA PUTA....



Mientras, sentía a Tony y al de atrás seguir con sus penetraciones cada vez más intensas y enérgicas. Notaba a aquellas jóvenes pollas palpitar impacientes en mi interior. Para cuando quise reaccionar oía de nuevo la voz de "Tony":





TOMA LECHE NENA, TOMA LECHE, NENA, TE LLENO..... AAAAHHHHHH. áBRETE BIEN QUE TENGO MAAAAÁS, AAAAHHHH. MENUDA LEFADA Te esTáS LLEVANDO... AHHHH... LECHE DE UNA SEMANA, NeNA, AAAAHHHHHH...





Borja desde adelante riendo decía:





VENGA TÍO, TODA DENTRO. LLENÁSELO BIEN, QUE LA ENCANTA. SOLO TUVISTE QUE VERLA ANTES. QUE LLEGUE A CASA REPLETA DE LECHE....Y CON UN BUEN BOMBO Y TÚ DALE BIEN POR EL CULO, JAJAJA





Aquellos mocosos lejos de humillarme conseguían excitarme más y más con sus comentarios vejatorios:





TODA, TODAAA, TODAAAAAA- decía el muy cabrón mientras notaba como invadía con su joven semilla todo mi interior. Notaba aquel joven semen desbordarse en mi vagina descontroladamente y junto con el de Borja (que aun lo tenía dentro) llenármela por completo. Aun tenía el miembro de Tony en mi interior cuando comencé a sentir al que quedaba, vaciarse en el interior de mi ano. Los espasmos que daba eran brutales y los ríos de esperma que soltaba semejantes a los de los demás..... En seguida noté como desenfundaban sus jóvenes miembros de mí y entre risas comentaban:





"QUE POLVO, TíOS. QUE POLVO"





Mientras, recogían sus ropas y se vestían camino al coche. Yo seguía tendida en el asiento trasero del mío y oía como arrancaban el suyo. Según pasaban por delante para irse pude oír las voces de Borja y sus amigos comentar:





-PUTA GUARRA... COMO LA HA GOZADO LA MUY PUTA. SE LO HEMOS DEJADO LLENO. ¿¿¿IMAGINÁIS QUE LA HAYAMOS PREÑADO??? JAJAJA.



-NO TE EXTRAÑE, CON LA LECHE QUE LA HE DADO.



-PUES QUE CARGUE EL CORNUDO CON EL BOMBO, JAJAJA. SI NO LA ATIENDE BIEN EN CASA ES A LO QUE SE ARRIESGA, NO TE JODE. A QUE SE LA PREÑEN POR AHÍ, JAJAJA





Me parecía increíble oír aquellos críos dirigirse a mí con aquel desprecio después de lo ocurrido. Pero allí estaba yo, tendida sobre el asiento trasero de mi coche, abierta aun de piernas y notando rebosar su semen caliente por mi interior....



domingo, 29 de mayo de 2011

Orgia en la playa

Este verano mi marido y yo estábamos disfrutando tranquilamente de las vacaciones y además de la playa y las visitas turísticas por los alrededores de la zona disfrutábamos de lo lindo en cualquier lugar de nuestros cuerpos. Después de tantas emociones no necesitábamos de nadie más o eso parecía.
En el hotel a últimos de mes hubo una especie de revolución y si hasta entonces todo estaba en calma, la llegada de un grupo de jóvenes alemanes lo alteraron todo. Eran trece, ocho chicos y cinco chicas. Apenas un par de ellos hablaban en español, pero no lo necesitaban mucho. A todas horas tenían ganas de juerga, bebiendo cerveza, haciendo juegos, bromas y todo tipo de actividades.
Lo mejor era que pese a que eran un grupo no se cerraban a los demás y fueron enganchando a más gente del hotel para reunirse con ellos. A los tres días de estar en el hotel su pandilla se había aumentado, con gente desde los 17 a los 46 años. Javier y yo incluidos, por supuesto. Nos integramos con mucha facilidad y nuestras tranquilas vacaciones cambiaron por completo. A todos nos decían que sólo tenían una semana y que querían aprovecharla. Ya no salíamos de la ciudad y nos íbamos todas las tardes con ellos a una pequeña cala, a beber, nadar, bailar, fumar y reírnos.
Así que llegó el último día para ellos y formamos una especie de bacanal, con un radiocasete con la música a tope y más bebidas que nunca, con una especie de bailes rituales muy divertidos de despedida en torno a la hoguera y nos fuimos desprendiendo de prejuicios. Antes de la media tarde, muchas chicas se despojaron de la parte de arriba de sus bikinis, sobre todo al principio las alemanas, más desinhibidas que nosotras las españolas. Y era muy divertido y excitante comprobar las erecciones bajo los bañadores de nuestros compañeros, que mientras jugaban al voley o al fútbol no apartaban ojo de ellas.
Los chicos fueron pidiendo más destapes, formábamos pequeños grupos y al final acabábamos viendo escenas como chicas jugando al voley completamente desnudas (hay fotos que lo comprueban), chicos masturbándose al verlas, parejas de desconocidos follando en el agua o incluso en las toallas siendo observados por los demás, sin cortarse por las fotos o las grabaciones con alguna cámara de vídeo, juegos eróticos en los que las parejas preestablecidas se deshacían y se enrollaban con otros... Al principio lo miraba escondida debajo de mis gafas de sol, pero luego comprendí que a nadie le importaba ser mirado, así que me las subí sobre mi pelo.
Era muy excitante, por ejemplo, ver a Javi enrollarse con alguna rubia. A veces sentía celos (sobre todo al principio, al ver que él se había desatado mucho antes que yo), otras veces me sorprendía de que no se negase ni a la rubia con las tetas caídas hasta la tripa, acabé disfrutando viendo cómo llegó a dejarse masturbar por una pelirroja más o menos escondido en un seto mirándome con una expresión de sentirse culpable hasta que me vio reír y supo que no le importaba que le hubiera pillado...
Hasta ahí fue cuando estuve pendiente de Javi. Porque tres chicos se acercaron a mí y a tres amigas que estábamos bebiendo y charlando sin dejar de observarlo todo. Eran muy simpáticos. Dos eran alemanes y uno andaluz. Éste nos decía que si no estábamos demasiado abrigadas: yo estaba con un bikini mínimo, de tirantes finos ajustados con un nudo por mi cuello, con dos triángulos amarillos que no me tapaban los pechos lateralmente, aunque cubriendo mis pezones. Y una braga amarilla de cintura baja también con tiras blancas por los lados que se ajustaban espléndidamente a mis glúteos y a mi entrepierna.
El chico era muy gracioso y bromeaba aprovechándose del mal manejo de nuestro idioma de los alemanes. Bebíamos y poco a poco mis amigas se fueron alejando o formando sus corrillos a mi lado. El andaluz después de matarme a carcajadas me dijo con todo el desparpajo del mundo que les enseñara los pechos, que ya habían disfrutado de mi pelo oscuro, de mi risa salerosa y de mis ojazos negros, que si tenía algún pezón deforme porque le parecía mi cuerpo formidable y no sabía por qué no lo enseñaba. Me decía: "venga, enséñale a la cámara tus pechos" (uno de los alemanes me estaba enfocando).
Le seguí el juego y en el mismo tono de broma le dije que si estaba preparado. Me tomé los pechos por encima del bikini y aparté los triangulitos haciéndolos a un lado mirando pícaramente a la cámara. Oí también un clic de una cámara de fotos y era un amigo que habíamos hecho, uno de los "abuelos" del grupo, de más de 40 años, casado, agradable y con tres hijos. Aún así no me corté, ni siquiera al ver su erección y su sonrisa. Al parecer estaba tomando todas las fotos que podía. Pero no me distraje más con él porque el andaluz me había puesto sus manos en mis pechos. Los palpaba como si no se lo creyese y no paraba de repetirme lo maravillosos que eran, redonditos, algo separados, con unos pezones marrones y claros, con las puntitas redondas y puntiagudas.
Acabó devorándomelos mientras el alemán no dejaba de grabar y de masturbarse, ya con el bañador en sus rodillas. Yo no iba a quedarme quieta, así que tiré el cigarro que sostenía y busqué la polla de aquel andaluz por debajo de su bañador. Lo masturbaba como podía porque el tipo estaba loco con mis pechos. Mmm... Me estaba haciendo disfrutar sólo con eso y con saber que me estaban grabando y cascándose una paja mirándome. Alguien me besó en el cuello por detrás y me aproximó su verga a mi braga. Y el otro alemán por un lado me metió la mano por un lado de la braga, apartándomela y buscando mi vagina. Aquello hizo que me corriese, y eso que el alemán no había llegado a meterme el dedo en el coño.
Tenía cuatro manos en mis pechos, la lengua del andaluz entrelazándose con la mía, una verga chocándose con mi braga y mis muslos por detrás, unos dedos jugando en mis entrañas. El andaluz se hizo a un lado sin dejar mi boca ni mis pechos y el alemán pudo bajarme las bragas y meterme su lengua dentro de mí. El de atrás (que era aquel amigo cuarentón por algunos piropos obscenos que me dedicaba y porque su tripa también destacaba) acomodó su gran aparato ahora entre mis nalgas, aunque sin pugnar aún por atravesar mi agujero porque le era imposible.
El alemán consiguió que me corriera otra vez. Hubo una pequeña disputa por follarme, pero al final mi amigo el cuarentón hizo valer su edad para agacharme y encularme. Fui notando su enorme verga entrando en mi recto y debía de estar tan mojada que no me dolió demasiado cuando su glande perforó mi entrada. Se agarraba a mi cintura y mientras los otros dos se bajaron sus bañadores y me mostraron sus vergas. No dudé en acariciarlas y metérmelas alternativamente en la boca. El alemán estaba más salido que el andaluz y se corrió al poco. También era más joven y había estado ocupado de mi coño. Su leche fue abundante y se me derramó en parte de la boca. Así que la polla del andaluz (tamaño normal) tuvo la suerte de que me la tragara casi por completo al ritmo de las embestidas de mi enculador, que se había dejado de miramientos y estaba partiéndome en dos, follándome hasta el fondo, hasta chocar sus testículos en mi culo.
Eso sí, no tardó más de un minuto el cuarentón dentro de mi recto. Un calor viscoso llenó mi agujero y cuando salió su polla el semen salió disparado de la presión. Antes de que el andaluz se viniera, el alemán de la cámara tomó el sitio del cuarentón y me enculó de un golpe. Por suerte el semen que me quedaba hizo de lubricante y pude contener más el dolor. También ayudó que la corrida del andaluz me distrajese un poco. El otro alemán tampoco duró demasiado y salió de mi culo dolorido, enrojecido y saturado de semen.
Los dos españoles siguieron acariciándome mientras que los alemanes se fueron a buscar otra presa. Me decían lo guarra que era y el cuarentón, Alonso, me decía que mi marido tenía mucha suerte de tener ese culo tan dilatado para él. No le importaba besarme en la boca, quizá un poco sorprendido de que no me negase. Era un hombre bastante peludo y su polla incluso en reposo era considerable. Aunque el resto de su cuerpo era antiestético, no podía dejar de acariciarle la verga y el glande para que volviese a reaccionar.
Nos sentamos y me puse de rodillas para hacerle una mamada a Alonso. Mientras, Paco, el andaluz, se hizo con mi culo y lo levantó en pompa porque él ya se había recuperado. Ya estaba cansada de que me dieran tanto por culo, pero estaba demasiado centrada en aquella vergota adormilada. Por suerte Paco fue más considerado y fue introduciendo su polla poco a poco, disfrutando de la presión que le estimulaba y diciéndome maravillas de mi ano.
También Alonso estaba disfrutando de la mamada y su verga volvió a su apogeo. Gorda, grande, algo torcida, con el capullo esplendoroso. Quería que Paco terminara pronto para poder cabalgarle. Y Paco no tardó, pero unas manos frías me sujetaron por las caderas y me impidieron echarme sobre él. Me di la vuelta y vi a un jovencito alemán, lleno de granos, pecoso y rubio, delgado, con un palo alargado pero de poco grosor que me enculaba de un golpe con todo descaro. Alonso me torció la boca y me llevó de nuevo a su polla y no pude protestar. Por suerte aquel crío se corrió nada más metérmela y me di prisa en dejar mi culo en pompa.
Tenía el culo muy dolorido, pero me había propuesto follarme aquella polla madurita y grande. Todavía mi vagina no había probado verga alguna y pese a lo mojada que estaba me costó bastante irme sentando sobre aquella barra de carne, aunque conseguí que me ocupara por completo. Al principio le cabalgué con lentitud, dando círculos, disfrutando del placer que me estaba invadiendo y olvidándome del dolor de mi ano, pero fui aumentando de rapidez conforme me acercaba a otro orgasmo. Y me corrí y aún él no había terminado. Era lento para entrar en acción, pero luego se veía que no desaprovechaba su erección. Me despegué de él, pero me tumbó y me levantó un muslo y me penetró pese a lo cansada y satisfecha que estaba. Notaba su piel en mi carne aún temblorosa, sus gemidos, sus esfuerzos, las ganas con que arreciaba según iba acercándose a eyacular. Le pedí que se derramase en mi vientre y él, gentilmente, lo hizo.
Ya había anochecido y estaba reventada. Por suerte cada cual estaba por un lado y no había ningún tío cerca de mí. Le pedí a Alonso que no se alejara de mí para buscar la braga de mi bikini y para que me acompañara al hotel, pues aunque casi todos estaban en medio de su faena o tumbados durmiendo plácidamente desnudos en las toallas, yo no quería levantarme con resaca y recordando lo que había pasado. Alonso me dijo que perfecto, que así buscaba su bañador. Yo tuve más suerte que él y estaba a nuestro lado, pero él tuvo que ponerse un bañador ajeno al no encontrar el suyo, aunque eso sí, la cámara estaba allí.
A pesar del cansancio y de encontrarme sucia, le invité a pasar a mi habitación. Se había portado muy bien conmigo. Javier aún no había llegado. Ya más calmados hablamos un rato y le pregunté por su mujer y sus hijos y me dijo que estaban fuera este fin de semana para ver a sus abuelos. Era muy agradable y educado y sin darnos cuenta ya eran las tres de la madrugada. Me propuso darnos un baño y llenos de espuma volvimos a enrollarnos, aunque no quiso penetrarme. Me confesó que últimamente había tenido problemas de erección porque había estado tomando una medicación. Pero sus caricias y sus besos y mi cansancio me satisfacían lo suficiente.
Estaba tan destrozada que cuando recuperé la conciencia estaba la luz del sol en mi cara, acurrucada contra él, que me miraba y me acariciaba el pelo. Me tomó de la mano y me hizo ver que estaba empalmado. Antes de cabalgarle le enfundé un preservativo ahora que estaba más lúcida y me eché sobre ese cuerpo que de día me pareció incluso más lamentable que ayer. Aún así, volvimos a hacer el amor.
Cuando estaba duchándose y yo me vestía, llegó Javier, con evidentes síntomas de cansancio y de resaca. Oyó el ruido de la ducha y a Alonso cantando y supo lo que había pasado. No podía reprocharme nada porque a él le había pasado algo similar. Luego la situación no fue tan embarazosa cuando salió Alonso con su toalla y vio a Javier porque él era muy correcto y sus disculpas eran innecesarias. Nos pidió no perder el contacto y nos intercambiamos teléfonos. Algunos días después, de nuevo vueltos a la calma, yo le conté lo que había hecho y él sus aventuras. Por suerte para ambos la aventura no nos costó ningún disgusto, ni enfermedad ninguna ni embarazo para mí y podemos recordar esta aventura veraniega como algo irrepetible.
 

Orgia en la PLaya de Mijas Costa

Habíamos estado toda la tarde en la playa con algunos amigos y llegando la tardecita nos retirábamos de la playa. Yo como vestimenta me había atado un pareo de gasa a la cadera y encima otro pareo de gasa que permitía si se fijaban bien, ver mis senos y mis partes más íntimas ya que me había quitado la malla de baño.
Antes de retirarnos decidimos caminar un poco por las dunas y unos chicos nos siguieron... nos alejamos bastante de los demás y los chicos seguían detrás nuestro.
En un momento nos alcanzan y me dicen que estoy muy linda y que les ha encantado verme toda la tarde con mi micro tanga en la playa y que les gustaría tocar mi cuerpo.
La osadía había sido bastante, considerando que mi esposo es un hombre muy grande y fuerte por lo que enfrentar a los chicos no hubiese sido problema.
Pero me gustó la actitud y riendo les dije que qué ganaban con tocarme solamente.
Entonces uno de ellos me dijo que de repente me tocaban un poco y yo me excitaba y luego todos ellos y mi esposo podrían disfrutarme.
Y que también yo podría disfrutar de ellos. Apenas dijeron esto se quitan las bermudas y me presentan una hermosa colección de duras e inmensas pijas, bastante grandes para lo que eran los chicos.
Lo miro a mi esposo y éste me mira como diciendo "si tu quieres".
Caminos despacio hasta ellos y entienden que estoy dispuesta a ser objeto de sus deseos. Mis gasas desaparecen de inmediato y muchas manos recorren todos mis rincones. Mis pezones se ponen duros al instante y siento como la humedad va lubricando mi concha. Varios dedos se introducen en mi concha y otros buscan mi culito.
Me sentía muy excitada y quería realmente hacerme coger por esos chicos, por lo que me agacho y me llevo a la boca una de las hermosas pijas que me ofrecían.
Me colocan hincada de rodillas y levantan mi cola de manera que pueden apreciar mi culo y mi concha totalmente depilada. Una lengua se hace cargo de mi culo y pronto estoy desesperada por tenerlo lleno de pija.
Mi esposo que estaba controlando toda la situación le da un preservativo a uno de los chicos y les dice que se deslice debajo mío y me la ponga en la concha.
Se desliza y me la pone en la concha y en ese momento comienzo a tener un orgasmo tan largo y fuerte que me hace llorar de placer.
Apenas termina mi orgasmo cuando siento que una enorme pija se mete en mi culo con mucha fuerza y comienza a bombear mi culo con mucha velocidad, lo que provoca en mi el segundo orgasmo de la tarde en el mismo momento que mi boca era llenada de espeso esperma. Trago un poco pero la mayor parte cae a la arena.
El culo me dolía horrores ya que la pija que había entrado en él era muy gruesa, pero me estaba gustando mucho la forma en que me cojían por lo que con la boca llena de semen les pido que me cojan fuerte, que me destrocen, que me llenen de pija.
Noto que el chico que me estaba sodomizando se estaba por acabar por lo que comencé a apretar y aflojar mi culo en forma rítmica provocando que el muchacho se acabara en forma bestial. Cuando me la está sacando del culo siento que se acaba el que estaba en mi concha y me aprieto contra él, quedándome quieta para que pudiese acabar a gusto.
Me sentía en las nubes ya que mi culo fue llenado por otra pija y lentamente se movía dentro mío al principio, para luego hacerlo violentamente. El culo me dolía bastante por lo que le pedí que me la sacara y me la pusiera en la concha. En ese momento otro chico se había deslizado debajo mío y me la había puesto en la concha. Por eso el muchacho que me sodomizaba me dice que ya está ocupada y yo le digo que entran dos. Haciendo bastante fuerza logra meterla y yo al sentirme totalmente llena me comienzo a acabar en forma repetida hasta que ambos se acaban y me dejan tirada boca para arriba en la arena, cansada y totalmente satisfecha.
Mi esposo les da una tarjeta para que nos llamen cuando quieran...

sábado, 14 de mayo de 2011

Comprando bragas


Cuando caminaba por las galerías de tiendas del Jirón de la Unión veía que muchas de ellas ya estaban cerrando sus puertas debido a la hora, así que me apresuré en buscar una donde vendieran ropa interior femenina, los hombres
me lanzaban algunos piropos obscenos mientras pasaba, creo que era debido a que estaba con una falda corta color café de vuelo, pero ni modo que me pusiera pantalón ya que soy secretaria de gerencia en una importante empresa
y no podía correr ya que mi senos hubieran empezado a bambolearse y ya me imagino el calibre de los piropos.

Al final de la calle vi una tienda grande que aún tenia la puerta abierta y entré rápidamente. En el mostrador había un par de dulces viejecitos como de 70 años, uno de ellos me dijo en que me podía atender mientras vi que el
otro se dirigía con una cierta cojera a cerrar la puerta, el del mostrador me dijo que solo iba a juntar la puerta para que no entrara mas gente. Pensé, que puede pasar con estos viejillos? y le pedí que me mostrara unas bragas y un sujetador transparentes, el viejito me dijo que se me veía cansada y me sirvió una copita de oporto, la cual tomé de un sorbo.

Me dio las bragas y el sujetador y me indico donde estaba el probador, era un cubiculo que tenia un espejo de cuerpo entero una silla transparente para sentarse y una cortina, la cual cerré bien para que no me vayan a espiar.

Cuando empecé a quitarme la ropa, comencé a sentir que la cabeza me daba un poco de vueltas, supuse que era el oporto que me habían invitado, un poco adormecida y con unos calores que no sé de donde venían, me quite la ropa
interior que tenia y me puse la que iba a comprar, en eso entro uno de los viejitos donde yo estaba y me pregunto si me quedaba bien o si quería una talla mas grande, le dije que no se preocupara, que yo le avisaba y el me
dijo, de ninguna manera hijita, aquí las clientas siempre salen satisfechas con su compra.

Yo no atinaba a nada por el mareo y el viejito toco mi chochito metiendo su mano entre mis piernas, y me dijo creo que está un poquito peque, tu que piensas Rubén? Y el otro viejo entró como una centella en el probador sin
mostrar la cojera que vi en un principio. El primero me dijo a ver siéntate preciosa para ver si estas cómoda y el viejito Rubén ya se había metido debajo del asiento transparente para ver debajo. En este punto yo solo
obedecía ordenes sin chistar y me daba excitación que alguien me mirara desde abajo con las piernas separadas como las tenia, así que el que había entrado primero me saco el sujetador dejando libres mi senos, cuando veo que
el viejito que estaba debajo de la silla se incorpora y abre la cremallera de su pantalón y deja salir su palo, quien iba a pensar que a esa edad se les podía parar de esa manera y vaya tranca que tenia, se puso delante de mí y
lo metió a mi boca y con la calentura que tenia empecé a chupárselo sintiendo un placer que no pensaba tener esa tarde, el otro sin demora se puso detrás de mí mientras me masajeaba las tetas, llenando sus manos con ellas.

Luego de un rato de estar chupandosela al viejito Rubén, exploto un torrente de leche en mi cara, la cual procedí a lamer y engullírmela toda, estaba excitada y quería que me penetren, me puse de pie y un par de manos me bajaron las braguitas que tenia puesta dejando mi cuerpo desnudo delante de esos dos viejitos depravados, me coloque en el suelo en cuatro patas y el primer viejito se saco su pichulota y me la metió en mi chucha que ya estaba bien lubricada, me empezó a bombear mientras Rubén se ponía delante para que se la chupe y su pinga logre la erección de hace un momento, así uno me
bombeaba y con mi mano izquierda masturbaba a Rubén mientras le daba una buena mamada.

Luego el primer viejito me lamía el ano y con su dedo dilataba mi esfínter, así que ya presagiaba una penetración por detrás, efectivamente se sentó en la silla y yo me senté en su tranca ayudada por Rubén, ensartada así me
recline sobre el primero mientras me comía por el ano y el viejito Rubén se echo encima de mí metiendo su pichula por mi chocha, prácticamente habíamos echo un sándwich. Los tres sudorosos nos movíamos rítmicamente hasta que sentí dos ríos de
leche que me inundaban, uno por el ano y el otro por mi chucha. Quedamos quietos, transpirando y agitados, perdí la cuenta de cuantos orgasmos había tenido.

Luego me ayudaron a vestirme y me despidieron con una bolsa llena de ropa interior, haciéndome prometer que vendría a visitarlos otra vez y creo que si voy a cumplir mi promesa.

sábado, 23 de abril de 2011

Calientapollas

Temía tirarme un sábado más conectada a internet y sin salir, pero a eso de las 12 mi amiga Paula llamó a mi móvil para decirme que en media hora me recogía para salir.
Me puse una minifalda vaquera, con una camiseta de tirantas roja y unos zapatos de tacón de color negro. La ropa interior como siempre provocativa, con un tanga de color rojo y… y nada más.
Cuando mi amiga llegó bajé rápidamente pues ya habíamos perdido bastante tiempo y la noche se hacía corta. Paula llevaba uno piratas negros con una camiseta blanca y unos tacones negros. Supongo que llevaría un tanga blanco, puesto que su sujetador de encaje era de ese color.
Al llegar a la zona de marcha situada...............
 junto a la playa la gente iba ya algo desfasada dada la hora, así que decidimos entrar en un bar bastante cutre que existe en la zona donde ponen chupitos muy baratos.
Dentro del bar sólo había un grupo de 6 chavales bastante bebidos ya compitiendo por ver quien era el que más chupitos bebía. Nosotras dos no solemos beber mucho puesto que se nos sube bastante rápido, pero esa noche habíamos llegado tarde y estaban a punto de cerrar, así que nos pedimos 4 chupitos cada una y nos lo bebimos del tirón.
Al salir del \"antro\" nos paró uno de esos chavales musculazos para invitarnos a pasar a una conocida discoteca del lugar en la cual nos invitarían a una copa. Aceptamos y ahí comenzó la noche para nosotras. Nos pedimos un ron cada una y nos fuimos a la pista a bailar, la música sonaba fuerte y los cuerpos se rozaban dada la cantidad de gente que había.
Empezamos a bailar sensualmente como solemos hacerlo, lo chicos ya nos miraban y alrededor nuestra teníamos un círculo de chavales intentando entrarnos. Nos acercábamos y nos apartábamos rápidamente de ellos. Bailábamos pegadas y muy sensuales. Los chicos se nos pegaban por detrás, rozando sus cada vez más duras pollas contra nuestros traseros, mientras nosotras hacíamos como si no nos diéramos cuenta y seguíamos bailando.
Empezó a sonar una canción que me encanta, de esas en la que mueves el culo y los chicos se mueren por bailar contigo para rozarse y tocarte sin problemas. En un segundo dos chicos se acercaron por detrás cociéndonos de la cintura y empezamos a bailar con ellos. El movimiento caliente y el roce de mi culo contra el chaval hacían que su polla creciera cada vez más. Me di cuenta de ello y empecé a bailar de forma más provocativa.
Sin darme cuenta por lo metida que estaba en la canción no vi como mi amiga se apartaba y empezaba a liarse con un chico. La canción terminó y decidí acercarme a mi amiga, pero el círculo formado a mí alrededor me lo impidió. Había como unos 7 chicos a mi alrededor que se acercaban para rozarse conmigo. El calor y el alcohol empezaron a hacer efecto y empecé a sentirme la reina de la fiesta.
Uno de los chicos se me acercó y me dijo que bailara con su amigo, que era muy tímido. Miré al chaval que vestía pantalón de pinza, jersey a cuadros y tenía unas gafas grandes…el típico empollón que nunca sale.
Me acerqué a él y empecé a rozarme con su cuerpo. Se retiraba, pero me abracé a él y lo acariciaba. Lo arrinconé contra una columna para que no se me escapara (me encanta poner a 1000 a chicos que sabes que no se van a atrever a tocar) empecé a rozar mi culo contra su polla mientras mis manos acariciaban su cuello, me agachaba y levantaba sensualmente. Los demás chicos me miraban con deseo y eso me ponía más caliente aún. El \"pobre chaval\" no sabía que hacer, no me tocaba, intentaba retirarse, pero sus \"amigos\" le vitoreaban y aplaudían.
Todos intentaban acercarse para rozar su cuerpo con el mío. Yo cada vez me sentía mas mareada y encima los chicos me ofrecían copas que yo aceptaba. Un chico se acercó por detrás y empezó a besarme en el cuello. Eso me encanta!!! Bailaba pegada a él y le dejaba hacer. Me acariciaba y tocaba sin que yo pusiera oposición.
Cuando me quise dar cuenta tenía a un chico rozándose por detrás y besándome el cuello mientras me tocaba todo el cuerpo y a cuatro amigos suyos alrededor y metiéndome mano de vez en cuando.
Mareada, pero con algo de conciencia, bailaba con cada uno de ellos y notaba sus pollas cada vez más duras. Uno de ellos intentó meterme la mano bajo la falda, pero al intentar impedírselo otro de sus amigos me cogió la mano para que su amigo pudiera hacer lo que quisiera.
Mientras un chico me agarraba una de las manos y se la llevaba a su paquete otro de los chicos me metía la mano bajo la falda tocando a su antojo todo lo que quería. Mientras los otros dos miraban y esperaban su oportunidad.
Empezaron a andar llevándome con ellos y no me di cuenta que salimos de la discoteca y nos dirigíamos a la playa. Por el camino seguían tocándome y metiéndome mano.
Uno vez en la playa un chico se tumbó y yo me senté encima de el moviéndome de forma provocativa. Sólo estaba jugando con ellos no quería llegar a nada más. Yo me acariciaba y me tocaba el pelo mientras me mordía el labio y notaba como cada vez se ponía más caliente.
Me levanté para irme, pero uno de ellos me dio un empujón y caí a la arena. Se echó encima de mí y comenzó a besarme. Yo intentaba apartar, pero sus amigos me cogieron las manos. Empezaron a tocarme y magrearme todo el cuerpo a su antojo. De un tirón me quitaron el tanga y empezaron a jugar con mi coño. Yo no podía hacer nada.
Cuando note que me la quería meter pataleé y grité, pero no podía hacer nada, eran cuatro chicos y me tenían cogida. El chico me la metió y empezó a follarme. Los demás chicos se reían mientras me tocaban las tetas y besaban.
Eso te pasa por calientapollas!!!
Métesela!!! Le está gustando!!!
Y era la verdad, sin quererlo empezaba a tener espasmos y mover involuntariamente mi cuerpo buscando una penetración más rápida y profunda. A los besos respondía sin oposición.
Los chicos se dieron cuenta y me soltaron las manos sacando sus pollas. Yo las cogía y pajeaba lentamente mientras el chico que me follaba empujaba con más fuerza como llegando al final. Saco su polla de mi coño y me la metió en la boca sin mi oposición y se corrió en ella. Los demás chicos reían y empezaron a correrse también en mi cara y mi boca.
Se fueron y me dejaron allí tiraba.

sexo en gimnasio con 2 amigos de mi hijo

Faltaban 3 meses para que llegara el verano y ante la insistencia de mi esposo que decía que me vería mas bonita y mejoraría mi salud decidí aceptar su propuesta de apuntarme a un gimnasio, al mismo en que estaban apuntados mi hijo y el, a decir verdad aunque los 2 llevaban mas de 2 años apuntados no se notaba mucho pq mi esposo tenia una prominente barriga desde hacia bastantes años motivada en parte por su trabajo como camionero y a pesar de la juventud de mi hijo, este iba por el mismo camino de ponerse bastante ceporro antes de cumplir la mayoría de edad.
Aunque como ya dije, al principio no estaba muy motivada, la verdad es que no me desagrado la experiencia, resultaba entretenido y entable una curiosa relación con 2 amigos de mi hijo a los que conocía desde hacia años del colegio y en los que nunca me había fijado especialmente hasta en que mi primer día de gimnasio pude ver que si los efectos del ejercicio no parecían notarse en mi esposo ni en mi hijo, si que lo hacían en estos 2 chicos, un año mayores que mi hijo y los cuales tenían unos cuerpos bastante musculados.
Mi ejercicio favorito era el spining y para mi sorpresa no me resulto complicado ni excesivamente cansado pq como ya dije a pesar de todo mi estado de forma era bastante bueno, en estas clases me ponía con Hector y Manuel, los 2 amigos de mi hijo dado que ni mi esposo ni mi hijo duraron mas de 15 minutos en la clase ya que no podían aguantar el ritmo de exigencia.
Después de 1 mes de clases me encontraba espectacular y había perdido 5 kilos de peso, los 2 amigos de mi hijo me piropeaban en cada sesión y me felicitaban por los resultados conseguidos, aunque en ocasiones estos piropos eran algo mas que "amigables" yo no daba ninguna importancia especial a aquella situación ya que me llevaba muy bien con ellos y a pesar de nuestras diferencias de edad podía decir que casi los tenia por amigos, además ni siquiera se me paso por la cabeza que aquellos muchachos fuertes, jóvenes y atléticos pudieran sentirse atraídos por la madre de su amigo la cual les doblaba la edad.
Aquel día en el gimnasio fue diferente, yo solía irme tras la clase de spining mientras mi esposo, mi hijo y sus 2 amigos solían quedarse 45 minutos mas, justo el tiempo que tardaba en cerrar el gimnasio después de la clase de spinning, a esas horas casi nunca había mas de 10 personas en el gimnasio y aquel día no fue diferente exceptuando el que Hector y Manuel me invitaron a tomar una sauna con ellos, algo que siempre hacían después de la clase y a lo que yo nunca me apuntaba por vergüenza mas que nada, ya que como he dicho, a esas horas a penas quedaba gente en el gimnasio y no me parecía muy apropiado meterme en la sauna medio desnuda con aquellos 2 jóvenes amigos de mi hijo.
Ese día fue diferente, me encontraba bastante cansada y ya tenía la confianza suficiente con aquellos muchachos como tenerles por unos amigos míos y no solo "los amigos de mi hijo", pensé que me vendría bien la sesión de sauna y me metí con ellos en la sala.
Yo iba con un albornoz y Hector y Manuel tapados por una toalla, lo cual resaltaba sus estupendos cuerpos sobre todo sus sudorosos torsos bien marcados, en la sauna había 2 jóvenes mas que se fueron casi al momento de entrar nosotros, así que al cerrar la puerta me quede sola con Hector y Manuel, en la puerta había una ventana pequeña desde la que podía ver la sala de musculación en la cual estaban mi esposo y mi hijo.
Llevábamos 5 minutos charlando en la sauna cuando pude ver como en la toalla de Hector se marcaba un buen bulto, yo me sonroje y no le di importancia, a mi edad ya no me asustaba de aquellas cosas pero no tarde en darme cuenta de que mientras hablábamos, aquel bulto seguía creciendo y Hector no dejaba de mirarme el canalillo, entonces me di cuenta de que el albornoz estaba mucho mas abierto de lo que yo pensaba y mis tetas habían quedado parcialmente descubiertas y la raja del albornoz me llegaba al ombligo, no se pq lo hice, pero decidí no taparme y hacer como si siguiera sin darme cuenta, supongo que me sentí halagada de que aquel enorme bulto en la toalla de Hector fuera provocado por mis tetas.
Pero la situación se me fue de las manos, Hector debió darse cuenta de que yo no hacia nada por taparme así que se levanto y con toda la cara del mundo dijo.
"Bueno Isabel, supongo que ya tenemos confianza suficiente y no te importara que tomemos la sauna como cuando estamos Manuel y yo solos"
Inocentemente y sin saber muy bien a que se refería, les dije que si, ante mi sorpresa tanto Hector como Manuel se quitaron las toallas de la cintura y las dejaron a un lado, luego se sentaron otra vez en los bancos completamente desnudos.
Yo me quede alucinada, me puse roja como un tomate y no dije nada, es mas, ni siquiera pude bajar la vista pq aquellas 2 pollas que tenia ante mis ojos me dejaron anonadada.
Si bien ya había comentado que aquellos 2 chicos tenían un aspecto estupendo, unos cuerpos bien moldeados y además eran bastante guapotes, no podía imaginar que aun guardaban mas "virtudes" bajo la ropa, pq aquellas 2 pollas sin duda lo eran.
La de Hector debía medir sus 20 centímetros y aunque la de Manuel era bastante mucho más normalita en cuanto a longitud, lo sorprendente era que parecía un salchichón de lo gorda que era.
Debí de mirarlas demasiado pq aquello fue como una invitación para los muchachos que no dudaron en levantarse y decirme
" Isabel, si quieres también puedes probarlas"
Aquellas palabras me sacaron de mi ensimismamiento, me levante pensando en mi esposo y mi hijo a los cuales podía ver desde la ventanita de la sauna, Hector y Manuel estaban delante mía, con sus pollas erectas apuntando directamente hacia mi, pensé en salir de la sauna inmediatamente pero un hormigueo en mi coño me hizo saber que deseaba aquellos miembros, sin decir nada me quite el albornoz dejando mis tetas y mi depilado coño libres ante los ojos de los 2 amigos de mi hijo y sin decir nada me arrodille ante aquellos 2 ídolos de carne en barra a los que debía adorar.

Me quedé anonadada, con la boca abierta ante la polla de Hector, el cual me miraba sonriendo. Despacio, le agarré el pene y fui descendiendo hasta que mis labios se posaron en su glande, comencé a besar su polla como una loca, primero despacio y luego deprisa, sacaba mi lengua y me empleaba a fondo sobre esa polla, después de haber ensalivado bien, me la metí en la boca o eso traté de hacer, porque apenas me entraba, tenia un sabor diferente a la de mi esposo, nada desagradable. Manuel no se quedo quieto, deslizó su mano por mi culo y luego un dedo por la raja y mientras yo trabajaba el aparato de Hector, Manuel me masajeaba el ano con su dedo. Mientras le comía la polla a Hector, me vino el primer orgasmo, casi de una manera dolorosa, pasado un rato, Hector comenzó a jadear más fuerte, me agarro con fuerza del pelo justo cuando Manuel enterró su dedo hasta el nudillo en mi recto.

Un chorro cálido y cremoso como el yogur comenzó a llenar mi boca…y aquello no paraba ni un momento, mi boca tragaba y tragaba pero aquello no me daba respiro…El esperma me rebasaba la boca y al final me tuve que quitar, con la boca llena y aun tuvo fuerza para enviarme un chorro que me manchó cara y pelo.

Me incorporé y comencé a tragar lentamente el semen, saboreándolo lentamente, jamás lo había echo con mi esposo ni con ninguno de los 3 novios que había tenido antes de conocerle pero estaba más caliente que una yegua en celo así que lo degusté como si fuera un vino. Tenía un sabor entre dulce y salado y parte se me escapó por las comisuras y me cayó en las tetas.

Aquello me saco de mi estupor, volví a pensar en mi hijo y en mi esposo al que jamás había engañado hasta aquel día, también pensé que cualquiera podía entrar en la sauna y pillarnos en aquella situación así que decidí levantarme y salir de allí antes de que aquello pasara a mayores o nos pillaran en plena faena, pero antes de que pudiera levantarme y coger mi albornoz, Manuel me tiró de las piernas, quedando tumbada sobre el suelo de madera de la sauna.
Me separó las piernas y hundió su cara en mi entrepierna, comenzó con mi clítoris y fue como si una explosión hubiese sucedido en mi vientre y en mi cabeza. Iba a gritar como una loca pero Hector se dio cuenta y me metió su polla flácida en la boca.
Solo se oía el chapoteo de la lengua de Manuel en mi coño y mis jadeos. La lengua de él se deslizaba una y otra vez dentro de mi inundada vagina y con una mano pajeaba mi clítoris,ni siquiera me di cuenta cuando Manuel dejo de lamerme y puso su dura polla en mi boca justo cuando era Hector el que ocupaba su lugar en mi coño, abrí los ojos y allí tenia yo ese salchichón dentro de la boca así que comencé a mamar como si me fuera la vida en ello, Manuel emitió un gemido, se inclinó sobre mi y agarrándome los pechos, comenzó a follarme la boca, entraba y salía como si fuera un coño y ante su rapidez no tardo mucho en correrse en mi boca.

El semen de Manuel era mucho mas cremoso y grumoso que el de Hector y como se movía mucho, parte se me derramó sobre mi cara, mientras yo también me corría, Hector comenzó a follarme con su martillo pilón, mientras Manuel me extendía con su polla la leche por mi cara y yo me recuperaba de los coletazos de mi orgasmo, noté como la bestia se apoyaba en mi coño y comenzaba a abrirse camino.

Comencé a gemir y a jadear, notaba como se iba abriendo camino a través de mi canal. Hector empujaba y empujaba pero era tan grande que le costaba mucho meterla, finalmente, Hector se salió un poco y de un violento empujón me la metió entera, los 20 cm entraron de golpe y la punta de su polla golpeó con violencia en el fondo de mi vagina.
Manuel se rió y dijo algo como "Tío, que vas a romper a la madre de Alvaro,jaja" pero Hector le dijo que "Por mis cojones que se la traga hasta los huevos" y comenzó a moverse.
Cada vez que la metía me golpeaba el fondo, pero ya no me dolía, todo lo contrario, empezaba a gustarme demasiado.
Manuel se puso de pie y miraba por la ventanita, "No te preocupes, el capullo de tu esposo y tu hijo no se enteran de nada, allí siguen levantado pesas"
Me sentía tan llena que aquel insulto hacia mi esposo y mi hijo no me importo, Hector estuvo follandome un rato mientras Manuel vigilaba que nadie nos interrumpiera, yo tumbada en el suelo, la cara manchada del esperma de Manuel, desnuda con Hector que me sujetaba los tobillos en alto y cada vez que entraba o salía, sonaba el chapoteo de mis jugos, que se me salían de mi coño y me resbalaban por la raja del culo.
Finalmente, Hector empujo hasta el fondo, hasta que sus cojones golpearon en mis nalgas y sin sacarla, comenzó a moverla en círculos, se apretó aun más y de un golpe, comenzó a correrse.
Yo, allí tumbada como la puta más puta, notaba como mi vagina se iba llenando de su leche, como el chorro golpeaba las paredes de mi vagina, por fin terminó, saco con un ruido de succión su fláccido miembro y se sentó en el suelo jadeando. Yo me quedé un rato con los ojos cerrados, relamiéndome los labios de los restos de la corrida de Manuel
Abrí los ojos y vi a Manuel haciéndose una paja.
- Manuel, que pasa, ¿es que no quieres follarme tu también?.
Manuel sonrió y se tumbó, con su rabo erecto hacia arriba, me levante y colocándome a horcajadas sobre su polla, me deje caer con todo mi peso sobre ella. Oí el chapoteo que hizo al entrar. Inmediatamente comencé a cabalgar sobre el como una posesa, cada vez que introducía su pene, salpicaba su pubis con mis jugos y la corrida de Hector, Manuel me agarraba las tetas y me las amasaba y pellizcaba los pezones, yo no quería parar, quería verme llena por dentro de leche, quería que me reventaran a pollazo, Manuel estaba cerca de correrse, así que cambie de postura, me puse de rodillas y abrazando su cuello, comenzó a llevar el control de la follada, llevábamos un rato así cuando me giré y vi a Hector cascándosela también, vendita juventud, menudo vigor. Le llamé entre jadeos:
- Hector…cariño…ven…que todavía tengo espacio para ti…
Y señalé mi ano, no se como se me ocurrió con la taladradora que tenia y teniendo en cuenta que jamás había usado mi entrada trasera, mi esposo era bastante convencional y nunca tuvo esa ocurrencia así que no pude evitar desear que Hector me enculara después de la gran follada que me había dado por el coño.

Hector se acerco y apunto como si culo tuviera una diana dibujada, de un solo golpe me la metió hasta las entrañas, nose como lo hizo pero me puso sus huevos hasta el culo y no me dolió nada.

Yo había visto en las películas hacia algunos años como dos tíos follaban analmente y vaginalmente a una chica…pues bien…ya lo estaba experimentando. Me follaban por turnos: Manuel me penetraba y Hector se quedaba quieto en mis intestinos y después de un rato, Manuel me jodia el recto y Hector dejaba descansar su tranca en mi caverna, esta sensación si que era nueva, dos pollas dentro de mi cuerpo follandome a la vez, el colmo del placer, sentía las dos pollas a través de la delgada pared que separa recto y vagina.
Luego Hector me puso a 4 patas y mientras martilleaba mi culo como un ariete que trata de derribar la puerta de un castillo, Manuel me metió la polla por la boca, estaba empalada por aquellas 2 pollas y me moría de placer.
"Te gusta la leche ¿verdad zorrita?
Siii, me encanta conteste yo
"Entonces tendrás que ganártela, pideme lo que quieres" dijo Manuel
Quiero que te corras en mi boca cabron, quiero que me llenes el estomago de semen, quiero sentir tu leche bajando por mi garganta, ver como tu polla escupe sobre mi cara la carga de tus pelotas.
"así me gusta putita, prepárate"
Expectante comencé a mamarle la polla mas rápidamente mientras con mis manos masajeaba sus cojones, la enculada a la que me estaba sometiendo Hector hacia que a cada una de sus embestidas la polla de Manuel me llegara hasta la campanilla así que aquello no se demoro mucho mas y entre jadeos Manuel se corrió en mi boca, vaciando por completo sus cojones en mi estomago.
En esa ocasión nada quedo en mi cara y me lo trague con mucho gusto, aprovechando que Manuel había terminado, Hector me levanto, me obligo a apoyar las manos en la puerta de la sauna y siguió taladrando mi culo con rabia, sabia lo que pretendía el muy cerdo, quería que viera a mi familia mientras me enculaban, pero no pude verles por la ventana hasta que por sorpresa pude ver como mi hijo y mi marido salían vestidos con sus mochilas a la espalda del vestuario masculino y se dirigían a la sauna.
"Joder, mi hijo y mi esposo vienen hacia aquí" dije yo
"Ostias, Manuel entretenles que quiero terminar y darle un nuevo vaso de leche a esta putona"
Manuel se puso la toalla y salio rápidamente de la sauna, cerro justo antes de que mi hijo y mi esposo pudieran verme de rodillas con la polla de Hector enterrada hasta la faringe y con mi nariz rozando sus cojones.
Pude ver lo que Manuel conversaba con mi familia
"Hombre Manuel, esta mi madre con Hector y contigo verdad"
"Que va, se fue hace unos 20 minutos"
"Es muy raro que no nos haya esperado" dijo mi esposo
"Dijo que estaba muy cansada, que se iba a tomar un buen vaso de leche y se iba a acostar"
El muy cabron dijo eso justo al instante en que la pistola de Hector empezó a disparar sus proyectiles dentro de mi boca, nuevamente me lo trague todo sin dejar ni una sola gota
"Pues nada entonces, ya nos veremos mañana Manuel y me alegra que os llevéis también con mi mujer, ella no quería venir al gimnasio pero creo que gracias a vosotros esto le empieza a gustar"
"No se preocupe, para Hector y para mi es un placer ayudar a la madre de Álvaro"
Mientras me limpiaba los restos de semen pude ver como mi hijo y mi marido salían del gimnasio, luego nos duchamos y cada cual se fue para su casa, llevo 2 semanas sin ir al gimnasio con la excusa de que tengo mucho trabajo, estoy bastante arrepentida de lo que ocurrió y algo me dice que si vuelvo al gimnasio acabare nuevamente en la sauna engañando a mi esposo con los amigos de mi hijo.